LA SITUACIÓN AZULGRANA|EL RIVAL DE LA CHAMPIONS

La duda del Bremen
• El equipo alemán confía en eliminar al Barça, pero se enfrenta al dilema de cómo afrontar un partido en el que le basta el empate

El miércoles, Torsten Frings, centrocampista del Werder Bremen, celebró su 30 cumpleaños con la valiosa victoria sobre el Chelsea. El próximo 5 de diciembre, cuando los alemanes intentarán conseguir en el Camp Nou, a costa del Barcelona, un puesto en los octavos de final de la Liga de Campeones, cumplirá 50 años su director técnico, Klaus Allofs.

"Sería injusto que a Torsten le regalen un triunfo y a mí no", bromeaba el exjugador ayer, en plena euforia por haber derrotado al equipo millonario de Mourinho.Aunque aún tengan que jugar dos encuentros de la Bundesliga y el entrenador, Thomas Schaaf, no quisiera dedicar ayer ninguna palabra al choque contra el Barça, en Bremen ya no piensan en otra cosa que en el viaje al Camp Nou.

"Gracias a la victoria sobre Chelsea iremos con mucha confianza a Barcelona para demostrar que les podemos hablar de tú a tú", añadió Allofs, ilusionado porque el Bremen se ha ido recuperando de la severa derrota encajada el año pasado ante el Olympique de Lyón, que le goleó en la Champions por 7-2.

"Poco a poco vamos olvidando aquel partido".La gran pregunta que se hacen los alemanes ahora es cómo afrontar el encuentro del Camp Nou, ya que a ellos les basta un empate para pasar ronda. "Es pronto para pensar ya lo que haremos, pero normalmente somos un equipo que apuesta por el fútbol ofensivo.

Estoy seguro de que en Barcelona no nos encerraremos atrás. Tendremos que jugar como si quisiéramos marcar algún gol", comentó Allofs.El mismo consejo le dio ayer, en las páginas del diario Die Welt, el exjugador Mario Basler: "La presión será para el Barça, que tiene que ganar.

El Bremen no debe lanzarse al ataque, pero tampoco jugar muy defensivo". Basler militaba en el Bayern Múnich cuando, en noviembre del 98, fue el último equipo alemán en ganar en el Camp Nou (1-2). "Aquel Barça jugaba con Figo y Rivaldo, pero no tenía la calidad y la clase mundial de este. Ya no es tan fácil ganar allí".

Un gran respeto

Pero tras superar al Chelsea, el Werder Bremen ya no se ve inferior a los azulgranas. "Para este partido no habrá favoritos,", dijo el mediocentro Diego, "ya que los dos equipos nos tendremos un gran respeto. Será en el campo donde se verá quién es mejor". Sin embargo, el brasileño alertó del exceso de confianza entre los suyos: "De momento, no hemos conseguido nada. Si no puntuamos en Barcelona, todo el esfuerzo habrá sido inútil".

Después del encuentro, José Mourinho ya supo encontrar una explicación a la derrota, que también le puede servir al Barça. "Ellos han jugado con cuatro, cinco gigantes". De hecho, cinco de sus jugadores miden más de 1,90 metros, y solo uno baja de 1,80. Un peligro por todo lo alto.