El Manchester City ofrecerá a Ronaldinho ¡12 millones de euros al año!

El Manchester City ofrecerá a Ronaldinho ¡12 millones de euros al año!

El City está dispuesto a tirar la casa por la ventana para contratar a Ronaldinho y presentará al jugador una oferta irrechazable

El tailandés Thaksin Shinawatra está dispuesto a confeccionar una plantilla de garantías para pelear por la Premier y pondrá toda la carne en el asador para hacerse con los servicios del jugador azulgrana. Según afirman varios medios británicos como el 'Daily Mail' o el 'Telegraph', varios directivos del Manchester City viajarán a Brasil para presentarle en persona a Ronaldinho un contrato de 12 millones de euros al año (unos 250.000 euros a la semana), cifra que igualaría la oferta que ya realizó el Milan al jugador hace unas semanas.Esta oferta podría ser, según afirman estos medios, definitiva para que el jugador se terminara decantando por el City. "Ronaldinho está mostrando cada vez más interés en irse a Inglaterra", aseguró una fuente al 'Daily Mail'.En caso de que el acuerdo se cerrase, Ronaldinho podría encontrarse en el City a su compatriota Jo Alves, delantero del CSKA de Moscú, que está cerca de firmar por el conjunto inglés.

Ronaldinho, el crack invisible
Ronaldinho se ha refugiado en su casa de Porto Alegre y sólo se le ha visto de forma fugaz en alguna salida con la familia.

A Ronaldinho, rumores y leyendas urbanas lo han situado los últimos días en los más variopintos rincones del planeta, pero lo cierto es que se encuentra en Porto Alegre. Autorizado por el Barça, aterrizó hace dos semanas en su ciudad natal para completar la fase final de la recuperación de la rotura del abductor que se produjo entrenando el 3 de abril y para empezar las vacaciones. En su país se ha refugiado con sus más allegados, en su casa, situada en el barrio de la Cavalhada, en la zona sur de la capital gaucha.Se despidió a la francesa, saliendo de incógnito de Barcelona. Su llegada aquí siguió los mismos derroteros. No hubo testigos ni de su aterrizaje, primero en Sao Paulo donde hizo escala previa, ni, posteriormente, en el Aeropuerto Internacional Salgado Filho, de Porto Alegre, donde fue recogido en la pista de aterrizaje por su seguridad privada.Nadie le esperó en su país, porque no se filtró su llegada. Se ha mantenido lejos de la prensa, como ya venía haciendo en Barcelona. Por si había alguna esperanza al respecto, Roberto ya ha comunicado a los periodistas locales que se vayan olvidando de él durante sus vacaciones porque seguirá fiel a la ley del silencio.Su hermano, por mucho que se encuentre de viaje, funciona como un filtro insalvable de superar para aquellos que intentan entrar en contacto con él. Si se sabe que Ronnie está en Porto Alegre es porque se le ha visto, aunque sea de forma fugaz y, prácticamente furtiva. Como, por ejemplo, lo hicieron los clientes del restaurante La Colina, cerca de su casa, donde cenó la semana pasada con amigos y familiares.Nadie de su entorno más próximo –o sea sus hermanos Deise y Roberto– han informado sobre cómo va la recuperación de la lesión. Teóricamente ya ha cumplido, con creces, el plazo de seis semanas de baja. No se tiene constancia que el blaugrana se haya desplazado a algún centro médico para realizar alguna ecografía y o cualquier otro tipo de exámenes para conocer si está ya restablecido. En principio, su primo Joaquim, que es su personal trainer, es el profesional encargado de ponerlo en forma. Si necesita los consejos médicos, Ronaldinho podría pasar consulta con el dr. Joao Zanini, una figura muy conocida en el medio deportivo en Río Grande do Sul, ya que formó parte de los servicios médicos del Gremio. La familia mantiene una magnífica relación con el galeno, tanto que éste es el responsable del área médica del ‘Instituto Ronaldinho Gaucho’, la fundación social que tiene el jugador en su ciudad.

Máxima seguridad

Durante su estancia en Brasil, vive rodeado de medidas de seguridad extremas, propias de un jefe de Estado. Ya, habitualmente, todos los miembros de la familia van por Porto Alegre en coche blindado a prueba de balas con vidrios oscuros y, acompañados, siempre como mínimo de dos miembros de seguridad privada, por muy fútil que sean sus actividades. En algunos casos, como en conciertos u otros actos públicos, hay incluso la participación de miembros de seguridad de paisano.Desde que en 2004 y 2005 hubo una ola de secuestros de madres de futbolistas en el estado de Sao Paulo, que empezó con la progenitora de Robinho, la seguridad se convirtió en una obsesión para los Assis Moreira. A veces hasta roza la paranoia, como confidencia algún que otro periodista gaucho. Un antiguo responsable del área de inteligencia de la Policía Militar de Porto Alegre conocida popularmente como PM2, es el encargado de organizar el dispositivo. Para preservar su integridad y evitar cualquier tipo de imprevistos, es habitual que Ronnie llegue a desplazarse en helicóptero. Si tiene que realizar un acto público, antes hay quien visita el local y, durante el evento, un vigilante privado armado está a su lado.La mansión de los Assis Moreira en Porto Alegre es un auténtico búnker, al igual que la casa de campo, que tiene en una urbanización privada en Eldorado do Sul, a las fueras de la ciudad. En estos dos lugares, Ronnie tiene absolutamente preservada su privacidad las 24 horas del día. Además, sus dependencias están equipadas con la infraestructura necesaria para entrenarse, practicar deporte, divertirse u organizar conciertos para sus amistades. Todo en la más absoluta discreción, lejos de la mirada de curiosos. Es, pues, imposible que haya una filtración en la burbuja en que está situado Ronaldinho, ya que es materialmente nadie consigue acercarse a él cuando está en su país.

Sin contacto con la prensa

Su última rueda de prensa aquí fue en diciembre de 2005, en la presentación de su personaje de cómic creado por Mauricio de Souza para la ‘Turma da Mónica’. Cuando empezaron a torcerse las cosas cortó los vínculos con la prensa de su ciudad. En diciembre de 2006, tras el fracaso en el Mundial de Clubs, lanzó su fundación en su ciudad, pero no quiso responder preguntas. Su último acto público en Porto Alegre se remonta a julio del año pasado cuando participó del paso de la antorcha de los Juegos Panamericanos.