PARTIDO 10
22.00h/TV3 - La Sexta - Ronaldinho será el gran protagonista del Barça-Depor tras la ofensiva del Milan
A partir de las diez de la noche el líder busca dar otro paso hacia el título de Liga
Rijkaard pide la máxima nota a su equipo “con talento pero también con trabajo”
Xavier Muñoz / BARCELONA
El de hoy en el Camp Nou es un partido diez. Barcelona-Deportivo es un clásico de las nuevas generaciones de futboleros, se juega a una hora más propia de una cena que de un partido y el líder de la Liga está obligado a dar la máxima nota en este tramo final de la temporada, donde tiene opción de lograr un doblete que solamente cuatro veces en su historia ha conquistado.
Pero, sobre todo, el de esta noche es el partido del '10', que para el Barça solamente tiene un nombre: Ronaldinho. Él ha sido el gran protagonista de las dos semanas de parón competitivo por la sensación, cada vez más evidente, de que el Milan va muy en serio a por la joya de la corona del Camp Nou, a por el jugador que, como admitió el jueves Frank Rijkaard, “devolvió la ilusión al club”.
Solamente el desarrollo de los acontecimientos inmediatos dirá si la historia de Ronaldinho en el equipo que le he convertido en el mejor jugador del mundo tendrá continuidad, aunque por ahora hablar de eso es prematuro. Si es por el deseo de su entrenador habrá nuevos capítulos del '10' en el Camp Nou. Ayer, Rijkaard volvió a dejar claro en rueda de prensa la importancia que tiene el crack brasileño en el club. “Él siempre dice que está contento en el Barça y tiene contrato”, señaló tras definirlo como “la personificación del '10'” después de ser desposeído del mítico dorsal en la 'seleçao'.
El rival preferido de Ronnie
Ante el Depor, las miradas serán para Ronaldinho. Si es por precedentes el brasileño cumplirá: el equipo gallego es el rival de la Liga al que más goles le ha marcado (6), junto a Racing y Sevilla. Además, en los tres partidos inmediatamente anteriores siempre mojó.
Rijkaard recondujo el debate de moda hacia los desafíos que se avecinan. “Mi única respuesta es que debemos trabajar todos juntos en el campo, y después, ya veremos”, fueron las palabras del técnico azulgrana.
Empatado a 53 puntos con el Sevilla aunque líder gracias al 'goalaverage', el Barça afronta las once jornadas ligueras restantes con la ambición legítima de coronarse por tercer año consecutivo rey de la regularidad. Para ello, Rijkaard señaló ayer que ha llegado “el momento de demostrarlo en el campo y acelerar aún más... si queremos lograr algo, no sólo empieza con el talento, sino con el trabajo”, insistió. Lo mejor es que con los jugadores más desequilibrantes nuevamente a disposición del técnico, excepto el lesionado y sancionado Deco, el Barça “tiene margen para crecer más”.
La interrupción de la Liga durante dos semanas coincidió con la contundente victoria del campeón en Huelva (0-4) y el propósito es seguir en esa línea. Mientras Deco se recupera de la intervención en el dedo corazón de su mano derecha, Rijkaard decidió no incluir en la convocatoria al mexicano Rafa Márquez, quien fue el último de los seleccionados azulgrana en regresar a Barcelona.
Tampoco entraron en la relación de citados Santi Ezquerro y Javier Saviola. Pese a que Rijkaard dijo ayer que el argentino “se ha ganado seguir en el club”, más bien parece que esta exclusión no hace más que confirmar que el delantero argentino está apurando sus últimos meses como azulgrana. Mientras, regresan a la lista Oleguer Presas, que en el Nuevo Colombino cumplió un partido de sanción, y el centrocampista Thiago Motta, que no entraba en una convocatoria desde el partido de Liga ante el Athletic.
Enfrente, el Deportivo llega con “la máxima ambición, a por los tres puntos”, como se encargó de proclamar ayer su técnico, Joaquín Caparrós. La baja más sensible es la del delantero Javier Arizmendi, sancionado, y la presencia más morbosa en la alineación la protagoniza Jorge Andrade. El central portugués ha olvidado ya la grave lesión que se produjo hace un año precisamente en el Camp Nou y, ahora que ha recuperado su mejor forma, vuelve a sonar como uno de los candidatos a reforzar la zaga 'culé' en verano.
Todos estos alicientes, sin embargo, no competirán en atenciones con la que suscitará la actuación de Ronaldinho tras la semana más cargada de rumores sobre su futuro desde que llegó hace cuatro años al Barça
A partir de las diez de la noche el líder busca dar otro paso hacia el título de Liga
Rijkaard pide la máxima nota a su equipo “con talento pero también con trabajo”
Xavier Muñoz / BARCELONA
El de hoy en el Camp Nou es un partido diez. Barcelona-Deportivo es un clásico de las nuevas generaciones de futboleros, se juega a una hora más propia de una cena que de un partido y el líder de la Liga está obligado a dar la máxima nota en este tramo final de la temporada, donde tiene opción de lograr un doblete que solamente cuatro veces en su historia ha conquistado.
Pero, sobre todo, el de esta noche es el partido del '10', que para el Barça solamente tiene un nombre: Ronaldinho. Él ha sido el gran protagonista de las dos semanas de parón competitivo por la sensación, cada vez más evidente, de que el Milan va muy en serio a por la joya de la corona del Camp Nou, a por el jugador que, como admitió el jueves Frank Rijkaard, “devolvió la ilusión al club”.
Solamente el desarrollo de los acontecimientos inmediatos dirá si la historia de Ronaldinho en el equipo que le he convertido en el mejor jugador del mundo tendrá continuidad, aunque por ahora hablar de eso es prematuro. Si es por el deseo de su entrenador habrá nuevos capítulos del '10' en el Camp Nou. Ayer, Rijkaard volvió a dejar claro en rueda de prensa la importancia que tiene el crack brasileño en el club. “Él siempre dice que está contento en el Barça y tiene contrato”, señaló tras definirlo como “la personificación del '10'” después de ser desposeído del mítico dorsal en la 'seleçao'.
El rival preferido de Ronnie
Ante el Depor, las miradas serán para Ronaldinho. Si es por precedentes el brasileño cumplirá: el equipo gallego es el rival de la Liga al que más goles le ha marcado (6), junto a Racing y Sevilla. Además, en los tres partidos inmediatamente anteriores siempre mojó.
Rijkaard recondujo el debate de moda hacia los desafíos que se avecinan. “Mi única respuesta es que debemos trabajar todos juntos en el campo, y después, ya veremos”, fueron las palabras del técnico azulgrana.
Empatado a 53 puntos con el Sevilla aunque líder gracias al 'goalaverage', el Barça afronta las once jornadas ligueras restantes con la ambición legítima de coronarse por tercer año consecutivo rey de la regularidad. Para ello, Rijkaard señaló ayer que ha llegado “el momento de demostrarlo en el campo y acelerar aún más... si queremos lograr algo, no sólo empieza con el talento, sino con el trabajo”, insistió. Lo mejor es que con los jugadores más desequilibrantes nuevamente a disposición del técnico, excepto el lesionado y sancionado Deco, el Barça “tiene margen para crecer más”.
La interrupción de la Liga durante dos semanas coincidió con la contundente victoria del campeón en Huelva (0-4) y el propósito es seguir en esa línea. Mientras Deco se recupera de la intervención en el dedo corazón de su mano derecha, Rijkaard decidió no incluir en la convocatoria al mexicano Rafa Márquez, quien fue el último de los seleccionados azulgrana en regresar a Barcelona.
Tampoco entraron en la relación de citados Santi Ezquerro y Javier Saviola. Pese a que Rijkaard dijo ayer que el argentino “se ha ganado seguir en el club”, más bien parece que esta exclusión no hace más que confirmar que el delantero argentino está apurando sus últimos meses como azulgrana. Mientras, regresan a la lista Oleguer Presas, que en el Nuevo Colombino cumplió un partido de sanción, y el centrocampista Thiago Motta, que no entraba en una convocatoria desde el partido de Liga ante el Athletic.
Enfrente, el Deportivo llega con “la máxima ambición, a por los tres puntos”, como se encargó de proclamar ayer su técnico, Joaquín Caparrós. La baja más sensible es la del delantero Javier Arizmendi, sancionado, y la presencia más morbosa en la alineación la protagoniza Jorge Andrade. El central portugués ha olvidado ya la grave lesión que se produjo hace un año precisamente en el Camp Nou y, ahora que ha recuperado su mejor forma, vuelve a sonar como uno de los candidatos a reforzar la zaga 'culé' en verano.
Todos estos alicientes, sin embargo, no competirán en atenciones con la que suscitará la actuación de Ronaldinho tras la semana más cargada de rumores sobre su futuro desde que llegó hace cuatro años al Barça
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