Touré, la fuerza del Barcelona

Touré, la fuerza del Barcelona

Yaya Touré ha prometido que tanto él como sus compañeros del FC Barcelona harán todo lo que puedan para superar al FC Bayern München y clasificarse para las semifinales de la UEFA Champions League.
Camino complicado

En su segunda temporada en el Camp Nou, el centrocampista defensivo de 25 años ha jugado un papel importante para ayudar al líder de la Liga a mantenerse vivo en las tres competiciones de esta temporada. Ahora que el equipo se enfrenta a su eliminatoria ante el Bayern, el internacional de Costa de Marfil sabe de la importancia de estar concentrado hasta el final: "Estamos entre los ocho mejores equipos de la Champions League y todos los rivales son muy buenos además de grandes campeones. No creo que vaya a ser fácil. Sin embargo, ahora va a ser más difícil ya que sabemos que si eliminamos al Bayern nos encontraremos con el Chelsea o el Liverpool en semifinales. Para clasificarnos para la siguiente ronda tendremos que estar alerta y muy en forma".
Nómada

Touré ha ganado mucha experiencia en Europa desde que abandonara la cantera del ASEC Mimosas en Abidjan. Comenzó su formación en el equipo belga del KSK Beveren en 2001 antes de pasar varias temporadas en el FC Metalurh Donetsk, Olympiacos CFP y AS Monaco FC, hasta que se convirtió en el primer jugador de su país que juega para el Barcelona. "Jugué al fútbol desde que era muy pequeño y pronto fui elegido para jugar en un joven equipo de mi zona. Después de aquello fue muy bueno ir a Bélgica y a pesar de que fue difícil, decidí irme a Ucrania. Después acabé en Grecia antes de irme a Francia, y ahora estoy aquí. La experiencia ganada fue muy útil y me ha ayudado mucho", comentó Touré, que no deja dudas acerca de su reputación como el nuevo Patrick Vieira: "Vieira es claramente mejor. Me queda un poco para estar a su nivel". El jugador también entrenó con el Arsenal FC, donde juega su hermano Kolo.
Gigante

Con una estatura de 1,91 metros y 90 kilos, Touré representa en el físico el polo opuesto a los Xavi Hernández, Andrés Iniesta y Lionel Messi, que comienzan a moverse en todas direcciones cuando su gigante compañero recupera la posesión. "Nos da mucha fortaleza atrás, así podemos aprovechar la ventaja de la velocidad de los delanteros. Es fuerte, recupera balones, es un buen cabeceador y se nota su calidad cuando es el momento de dar un pase", sentenció el secretario técnico del Barcelona, Txiki Beguiristain.
Trabajo sucio

De hecho, hacer el trabajo sucio permite a sus compañeros ser más creativos con el objetivo del buen juego que entretenga a los aficionados: "Cada vez que pisamos el césped intentamos agradar a la afición y a nosotros mismos. Al final del día lo que es importante es la victoria, pero para nosotros la forma en la que jugamos es también una victoria. Aquí a la gente le gusta un bonito estilo de juego. Estamos ganando muchos partidos y espero que esta racha pueda continuar hasta el final", comentó. El Barça recibe este miércoles al Bayern en el partido de ida de los cuartos de final de la UEFA Champions League.
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