La situación de los dos grandes | mirador
La situación de los dos grandes mirador
Ahora resulta que Guardiola es tonto
Por Emilio Pérez de RozasAhora resulta que Guardiola es tonto
Cuando Florentino Pérez contrató a José Mourinho contra la opinión de Jorge Valdano, todos, el primero Pep Guardiola, supimos que la temporada 2010-11 iba a jugarse en las salas de prensa más que en los terrenos de juego.
Es posible, sí, que buena parte de la culpa de algunas de las cosas que le ocurren al Barça se deban a la desaparición de su presidente, que ni siquiera se presentó en el primer partido oficial de su equipo, lo que no tiene explicación alguna.
Pero, de lo que no cabe duda alguna (y eso deberían de recordarlo a gritos todos esos culés que temen estos días que Guardiola se haya vuelto loco, que la plantilla sea corta, que no llegue Cesc o que se escape Özil) es de que el Madrid, Floren, Mou y el profeta se cambiarían, ahora mismo, por el Barça, por su estilo, por su proyecto, por su equipo, por su plantilla, sí, sí, también por su plantilla, por sus títulos (7 de 9) y por lo que está por llegar. Que es mucho.
Afortunadamente, hace mucho tiempo que, de la mano de Johan Cruyff, el Barça apostó por un modelo. Y en ello está. Un modelo que ha terminado siendo campeón del mundo. Un modelo que se basa (no lo olviden) en Messi (coste cero) frente a CR7 (96 millones de euros).
El Barça, no solo tiene un entrenador que cree ciegamente en ese modelo, sino que tiene la mejor cantera del mundo. Sería bueno que Bar-
ça TV enseñase algún día el despacho que Guardiola ocupa en la Ciutat Esportiva. No tiene paredes. Tiene tres inmensos cristales. ¿Saben a dónde dan esos vidrios? A los campos de entrenamiento del Barça B, del juvenil A y del juvenil B. Si Guardiola dice que lo que hubiese hecho Özil en el Barça, lo puede hacer Thiago, habrá que creerle. Tras Valdés, Bojan, Busquets y Pedro (¿qué valdrían ahora en el mercado?), vienen más. Tantos que no me extrañaría que Guardiola afronte este año algún partido con Valdés; Bartra, Piqué, Puyol, Muniesa; Busquets, Xavi, Thiago; Pedro, Messi e Iniesta.
Es posible, sí, que buena parte de la culpa de algunas de las cosas que le ocurren al Barça se deban a la desaparición de su presidente, que ni siquiera se presentó en el primer partido oficial de su equipo, lo que no tiene explicación alguna.
Pero, de lo que no cabe duda alguna (y eso deberían de recordarlo a gritos todos esos culés que temen estos días que Guardiola se haya vuelto loco, que la plantilla sea corta, que no llegue Cesc o que se escape Özil) es de que el Madrid, Floren, Mou y el profeta se cambiarían, ahora mismo, por el Barça, por su estilo, por su proyecto, por su equipo, por su plantilla, sí, sí, también por su plantilla, por sus títulos (7 de 9) y por lo que está por llegar. Que es mucho.
Afortunadamente, hace mucho tiempo que, de la mano de Johan Cruyff, el Barça apostó por un modelo. Y en ello está. Un modelo que ha terminado siendo campeón del mundo. Un modelo que se basa (no lo olviden) en Messi (coste cero) frente a CR7 (96 millones de euros).
El Barça, no solo tiene un entrenador que cree ciegamente en ese modelo, sino que tiene la mejor cantera del mundo. Sería bueno que Bar-
ça TV enseñase algún día el despacho que Guardiola ocupa en la Ciutat Esportiva. No tiene paredes. Tiene tres inmensos cristales. ¿Saben a dónde dan esos vidrios? A los campos de entrenamiento del Barça B, del juvenil A y del juvenil B. Si Guardiola dice que lo que hubiese hecho Özil en el Barça, lo puede hacer Thiago, habrá que creerle. Tras Valdés, Bojan, Busquets y Pedro (¿qué valdrían ahora en el mercado?), vienen más. Tantos que no me extrañaría que Guardiola afronte este año algún partido con Valdés; Bartra, Piqué, Puyol, Muniesa; Busquets, Xavi, Thiago; Pedro, Messi e Iniesta.
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