Penya Barcelonista de Lisboa

divendres, de novembre 27, 2009

Calentando Motores


Las lecciones dictadas por Guardiola
El técnico del FC Barcelona volvió a demostrar su capacidad y que es merecedor de una mayor credibilidad


La cómoda y espléndida victoria que el FC Barcelona obtuvo sobre el Inter de Milán, actual campeón y líder de Italia, dejó en el capítulo de lo inolvidable nuevas lecciones de cómo desde la sencillez se debe dirigir un grupo en el que se mezclan egos de estrellas consagradas con ansias de jóvenes que buscan la gloria lo más rápido posible. Pep Guardiola, apremiado como estaba ante un partido tan importante, en el que el campeón de Europa podía haber quedado eliminado de combinarse dos resultados, acabó presionado, no sólo por la presencia de Eto'o en el Camp Nou -del que él prescindió-, ni por el duelo con Mourinho -candidato a ser técnico del Barça antes de ser él el elegido-, sino también porque los medios reclamaban la presencia de Ibrahimovic y Messi en el equipo pese a estar tocados. Pep, que decidió prescindir de sus cracks antes de que acabara el otro partido del grupo en Kazán y a los que no pensaba alinear aunque el equipo hubiera ido perdiendo, apostó por sus principios, por la coherencia para tomar decisiones con criterio que no lastimaron al grupo y sí, en cambio, acabaron por dejar una enseñanza satisfactoria para todos y reconfortando la moral del entrenador.
CONFIANZA EN EL GRUPO
"Déjenme ganar sin Messi", reclamó Pep antes del partido
Los médicos habían dado su diagnóstico. Ni Ibra ni Messi tenían que jugar. Era un riesgo forzar su participación en un encuentro de tanta trascendencia. "Creemos firmemente en la idea de nuestro juego", dice el entorno de Pep, de la misma forma que comparó la situación con la de los Lakers sin Kobe Bryant y de los Chicago sin Michael Jordan. Pep confía tanto en sus jugadores, tiene tanta fe en el equipo yen la calidad del grupo, que estaba convencido y seguro de que el Barça ahora puede jugar sin estrellas y ganar, y cree que el concepto es tan bueno que sirve con cualquier nombre. Tras comunicar en el hotel el once inicial, ya en el Camp Nou, Guardiola explicó a cada uno de los titulares lo que quería de él en el partido. Así que Pedro, Iniesta, Xavi y el resto sabían perfectamente por dónde fallaban sus rivales, por dónde le entraba el agua al coco.
JUEGA QUIEN ESTÁ EN FORMA
Ibrahimovic y Messi querían jugar aunque fuera con dolor
Lo importante delante de un grupo es trabajar, actuar con coherencia, mantener la humildad y el respeto. Forzar la alineación de Ibra y Messi era apoyarse en dos que todo el grupo sabía que no estaban en su mejor momento. Los dos mostraron su predisposición para jugar aunque fuera con dolor y no saltaron de alegría, precisamente, cuando conocieron la decisión del técnico. Pero luego acabaron tan felices como todo el barcelonismo. Es verdad que se jugaba la Champions, pero Guardiola también pensaba en el Madrid y, especialmente, en el Mundial de clubs, un título que le apetece mucho por el simple hecho de no haber sido conquistado jamás por el club. El partido se ganó y los lesionados no arriesgaron.
VALORAR A LOS COMPAÑEROS
Desde el banquillo los dos cracks del Barça vieron la soledad de Eto'o
Messi es candidato a ganar los mayores premios individuales que da el fútbol. De la lección de ayer, tanto el argentino como el sueco pueden aprender el valor que tienen los compañeros para llegar a donde han llegado. Desde esa posición incómoda del banquillo, Ibra y Messi pudieron vivir la soledad de Eto´o, otrora gran realizador del Barça y el martes un delantero sin ningún compañero que lo arropara para lo que mejor sabe hacer.
EL ESTUDIO DEL RIVAL
Mourinho: "Si juega Messi, jugará Chivu; si es Pedro, jugará Chivu"
Pep dejó de asistir a una entrega de premios en Madrid para estudiar al Cultural Leonesa. Ahí demostró que no quiere perder un minuto en algo que no es su trabajo. Mourinho tuvo una respuesta chula cuando fue preguntado por las variantes del Barça. dio a entender que lo sabía todo y que no esperaba ninguna sorpresa. El portugués dispuso a Chivu, como había anunciado, por la izquierda, pero no esperaba que por ese lado apareciera de entrada Iniesta y mucho menos que Alves lo hiciera con tanta intensidad. Al final a Mourinho sólo le quedó decirle a Pep al oído: "¡Qué mierda de grupo nos ha tocado!", y luego ante la prensa reconocer la superioridad del Barça y de algunos de sus jugadores: "Sólo hay un Iniesta, sólo hay un Xavi, son únicos en el mundo".
PEP MERECE MÁS CONFIANZA
De un técnicotriunfador, de la casa, no se puede dudar constantemente
Si algo ha demostrado Guardiola es que merece toda la confianza. El equipo practica el estilo deseado por la afición yque es envidiado por los rivales. Tiene el respeto del vestuario, trabaja todas las horas para el Barça, no ha abusado de su éxito para pedir una renovación extraordinaria, y todavía no ha perdido nada de lo que ha ganado.