La final del siglo
La final del siglo
El Barça llega a Roma dispuesto a culminar la que, en caso de ganar, sería la mejor temporada de sus 110 años de historia. Con la Liga y la Copa ya en el bolsillo, los discípulos de Pep Guardiola intentarán coronarse ahora como 'reyes' de Europa y llevar a las vitrinas del club la tercera Champions de su historia. La primera fue en Londres, en 1992. La segunda en París, en el 2006... y ahora puede aumentar su leyenda poniendo el broche de oro en la 'ciudad eterna'.
El equipo azulgrana ha despertado la admiración, no sólo por sus resultados, sino por su magnífico fútbol: alegre, valiente y ofensivo, siguiendo la tradición de las dos últimas décadas en el Camp Nou. Una máquina de hacer goles -más de cien sólo en la Liga-, un equipo con el sello de la cantera y liderado por el talento de magos del balón como Leo Messi, Andrés Iniesta o Xavi Hernández, por citar tres ejemplos.
Enfrente estará el vigente campeón: el todopoderoso Manchester United, ganador a su vez de las tres últimas ediciones de la Liga inglesa. En su éxito han tenido mucho que ver dos factores: su demoledor ataque, con Cristiano Ronaldo a la cabeza -el portugués desequilibra con su rapidez, habilidad y eficacia ante la portería rival-; y, sobre todo, su defensa. Un dato basta para corroborarlo: en 38 jornadas en la Premier, sólo ha encajado 24 goles.
El veterano Alex Ferguson, tras dos décadas al frente del banquillo de los 'red devils', está convencido de que la final no decepcionará a nadie: "Ha habido muchos empates sin goles o 1-0 los últimos años. Tengo la sensación de que esta vez no será así".
A diferencia de Ferguson, su homólogo barcelonista Pep Guardiola no cree que en Roma se vaya a ver un Manchester especialmente ofensivo: "Ellos van a tomar el referente de los dos partidos que jugamos contra el Chelsea. A ver si hacen lo mismo", comentó, aludiendo a las dificultades que su equipo pasó para superar al equipo londinense en las semifinales: 0-0 en la ida y 1-1 en la vuelta, con gol salvador de Andrés Iniesta en el descuento.
El Barça ha recuperado a última hora a dos de sus puntales en ataque, Thierry Henry y el ya citado Iniesta, retablecidos ya de sus respectivas lesiones. Pero deberá improvisar una defensa de circunstancias debido a las bajas de tres hombres: el lesionado Rafa Márquez y los sancionados Daniel Alves y Eric Abidal. En su lugar entrarían Touré Yayá, retrasando su posición al eje de la zaga, Carles Puyol por la derecha y Sylvinho o Keita por la izquierda. En el Manchester United, la única duda es la de su central, Rio Ferdinand. Un jugador con mucho peso y líder en la retaguardia junto al serbio Nemenja Vidic. Ambos son muy peligrosos en el juego aéreo.
Los ingleses llevan 25 partidos invictos en Europa. Y el Barcelona es el máximo goleador de la competición, con 30 dianas en su haber, entre las que destacan las ocho de Leo Messi. El jugador que, junto a Cristiano Ronaldo, acaparará todas las miradas en Roma. El argentino se perdió por lesión la final del 2006, y desea sacarse la espina a lo grande. Si lo hace, destronará de paso al luso, que fue galardonado este año como mejor futbolista del mundo.
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