Penya Barcelonista de Lisboa

dimecres, d’abril 29, 2009

LIGA DE CAMPEONES|LAS CLAVES DEL PARTIDO


Cruyff: 'El Barça marcará, estoy seguro'
Es la Champions. A ida y vuelta. El Barça tiene dos resultados a favor: el empate y la victoria. El problema es haber perdido dos defensas. Y buenos.
• El Chelsea tratará de aprovechar en Londres la ausencia de los centrales azulgranas


El Chelsea ha sacado un buen resultado del Camp Nou. Pero no el mejor. Probablemente el que perseguía. No quiso más. No buscó más. Pero el Chelsea sabe que ese 0-0 puede ser insuficiente. Lo sabe bien. Porque sabe que el Barça es un equipo ofensivo, que solo ha dejado de marcar en cuatro de los 54 encuentros oficiales que lleva disputados este año.

1 Guus Hiddink no se dejó sorprender

No tenía mayor obsesión que evitar lo que le ocurrió al Bayern de Munich. Cierto, el Chelsea parece, en estos momentos, mejor equipo que el campeón alemán pero Guus Hiddink sabía, mejor que nadie, que si trataba de jugarle de tú al Barça saldría trasquilado del Camp Nou como salió el conjunto de Múnich.De ahí que mi compatriota no engañase a nadie cuando dijo, tras visionar varias veces el vídeo del Barça-Bayern (4-0), que a él no le ocurriría lo que a los alemanes. Dijo que no se dejaría sorprender y así fue. Y para conseguir esa meta --vital para tener opciones de eliminar al Barça el próximo miércoles-- no le dolieron prendas e, incluso, se atrevió a jugar casi al cerrojo durante los 90 minutos de partido.He de confesar que pensé que, a los 20 minutos, el Chelsea empezaría a soltar algún contragolpe o, como mínimo, a querer jugar a fútbol, pero me equivoqué. Siguió con su idea de desquiciar al Barça a base de interrumpir su juego fluido, hacer faltas y perder tiempo.

2 El árbitro fue demasiado permisivo

No pienso hablar del posible penalti a Henry, no lo hago nunca, no debe hacerse. Pero el arbitraje de anoche jugó en contra del Barça. Y mucho. Perjudicó el espectáculo y penalizó en exceso al único equipo que quería jugar, que fue el Barça. La actuación del colegiado alemán tuvo cierta complicidad con la estrategia del Chelsea, ya que permitió que el conjunto inglés marcase el ritmo del partido, lo que significa que toleró, en exceso, que perdiesen tiempo, se tirasen al suelo y viviesen de las interrupciones, una estrategia que no favorece, en nada, la idea futbolística del Barça, que precisa de fluidez y velocidad.Llegado a este punto, no dejaré de comentar lo que ya dije en su momento. Por ejemplo, la noche que el Espanyol visitó el Camp Nou o el día que Juande Ramos debutó en el estadi: el Barça se contagió de ese juego brusco, marrullero, bronco que ideó el Chelsea. Y ese fue su error, crisparse, entrar en ese tipo de controversias y disputas, que te sacan del partido y, sobre todo, impiden que tú, que tienes una idea de cómo quieres jugar, no puedas ejecutarla.

3 Sin Márquez ni Puyol, mala cosa

Del mismo modo que confío que el Barça puede perfectamente marcar uno o dos goles en Stamford Bridge (el Liverpool le metió cuatro en la anterior eliminatoria), sospecho que Pep Guardiola tendrá más de un problema y quebradero de cabeza para sustituir a dos grandes jugadores como Puyol y Márquez. Sobre todo el mexicano, que es un futbolista vital, no ya solo en el momento de marcar la línea defensiva y centrar a sus compañeros, sino en la faceta de iniciar el juego ofensivo del Barça. Es Márquez, y ningún otro, quien desatasca los partidos cuando los virtuosos de delante están bien marcados. Nos espera un partido de vuelta con cientos de balones bombeados sobre el portal de Víctor Valdés.