Serial-Telenovela:Adiós a Ronaldinho

Adiós a Ronaldinho
• El jugador sufre una lesión muscular, estará 6 semanas de baja y se despide de la temporada

El aductor medio de la pierna derecha de Ronaldinho se desgarró el jueves y puso, tal vez, epílogo a lo que había sido una bella historia de amor con el Barça. En una "acción fortuita", según recordaron los médicos, el brasileño sufrió en el entrenamiento una rotura muscular, aunque no era en el mismo lugar en que padecía las molestias que le han tenido casi un mes apartado. Poco importa porque la estrella deberá ahora estar seis semanas de baja. Justo lo que resta por jugar. O sea, adiós de Ronaldinho. A la temporada y, seguramente, al Barça. Un final insólito para un idilio que parecía eterno.Ayer, el equipo trabajó a puerta cerrada en el Miniestadi pensando en la cita de mañana con el Getafe. Pero Ronaldinho no estaba. Hace meses, muchos meses, que no se ha visto realmente al brasileño, convertido poco menos que en un jugador invisible. Ayer, sin embargo, todo lo que sucedió a su alrededor tenía un aire de punto final, a pesar de que en los dos últimos días el jugador había intentado regresar a la normalidad. Quería volver. La cercanía de una posible semifinal de la Champions ante el Manchester le estimulaba. Se sentía con fuerza. O eso creía. Corrió durante dos entrenamientos, solo dos, como uno más del grupo. Pero sus músculos, poco acostumbrados a la intensidad de esos esfuerzos, no han resistido.

ABATIDO

Después de unos tres extraños meses del 2008 en los que había realizado una pretemporada en solitario (enero), había vivido más tiempo en el banquillo que en el campo (febrero) y logró encadenar tres partidos consecutivos como titular (su mayor hito), Ronaldinho pensó que aún estaba a tiempo. El jueves, sin embargo, descubrió que no. Con un punto de fatalidad porque nadie le lesionó en ese entrenamiento. Todo fue "fortuito", suficiente para saber que su último encuentro (el 9 de marzo, 1-2 con el Villarreal) ha sido, tal vez, el último con la camiseta azulgrana. Ayer se supo, a través, eso sí, de su hermano y agente Roberto de Assis, que está abatido. Incapaz de entender qué le ha pasado en estos dos últimos años.Ni siquiera lo que ha sucedido en el desplome final. Cuando su desordenada vida nocturna se había hecho asunto de debate público. Todo empezó cuando se puso a Ronaldinho en la báscula y daba algunos kilos de más. Poco a poco, se erosionó su figura, de tal manera que ni Frank Rijkaard, el entrenador que mejor le ha entendido y quien más le ha protegido, tenía defensa para él. Su mal rendimiento en el campo (dos goles en tres meses, uno de penalti y otro de chilena al Atlético, quizá el último) contribuyeron todavía más a abrir incógnitas.

UN PROYECTO AGOTADO

Mientras el club y el jugador aún discuten sobre el primer comunicado médico, aquel en el que se precisaba que no sufría lesión tendinosa o muscular, hecho público "sin el consentimiento de Ronaldinho", según recordó su hermano, el Barça tiene asumido que no solo se ha desgarrado el aductor medio de la pierna derecha. Ni mucho menos. Se ha roto todo. Tras la lesión muscular de Ronaldinho se acaba en el Camp Nou, pase lo que pase en estos dos meses finales, un proyecto. Hasta una manera de entender el fútbol. Por eso, se duda de Rijkaard, el técnico que lo ha pilotado. Juntos llegaron Ronaldinho y Rijkaard al Barça. Juntos pueden abandonarlo ahora, aunque, tal vez, no de la misma manera.

CAMBIO DE CICLO

A la misma hora, prácticamente, en que Ronaldinho se sometía ayer a unas pruebas médicas, Messi pisaba La Masia, recién regresado de Argentina. Hace ya tiempo que simbólicamente se produjo el cambio de ciclo en el Barça. Ahora, falta comprobar como se oficializará la separación del jugador que cambió la historia del club en tres años. De momento, es tumultuosa. Y lo será más. Hace unos días, Roberto de Assis esgrimió acogerse al artículo 17 de la FIFA para romper el contrato unilateralmente y salir del Camp Nou por 16 millones de euros, flirteando incluso con la posibilidad de recalar en el Madrid. La pregunta es ahora: ¿con qué camiseta volverá Ronaldinho a jugar?.