Penya Barcelonista de Lisboa

dimecres, de novembre 14, 2007

Alcoyano 0 - 3 Barcelona


El Barça liquida al Alcoyano en un partido con mejor actitud
• Henry, Gudjohnsen, de penalti, y Bojan

No fue un partido para editar un vídeo, pero tal y como anda el Barça, hay triunfos valiosos. No porque el Alcoyano, que deambula por la cola de la Segunda B (lleva dos meses sin ganar), sea un test realmente serio. Pero sirvió para que Frank Rijkaard descubriera un equipo más veloz, con un aire más dinámico, donde se vieron detalles buenos en la segunda mitad.

Nada extraordinario, pero quizá sintomático. Una buena noticia que Henry vuelva a marcar, que Gudjohnsen tire hasta los penaltis y que Bojan, salga cuando salga, deje cosas para recordar. En Alcoi o en el jardín de su casa. Así es Bojan.El rival tampoco permitía extraer demasiadas conclusiones, aunque el Athletic empató en el campo del Hércules (2-2) y el Sevilla en Denia (1-1).

El Alcoyano, un equipo que pelea por evitar el descenso a Tercera, pensó que enfrente tenía al mismo Barça da pena fuera de casa. Era la misma camiseta de Getafe, pero con otro espíritu. Al menos, lo que se descubrió a primera vista. Otra ambición, más entrega y, sobre todo, mayor compromiso. Nadie dejó de correr en Alcoi. Desde Iniesta, desplazado a la posición de extremo izquierdo, ejerciendo de Ronaldinho, del bueno, especialmente en la primera mitad, a Giovani. Horas después de que Rijkaard se plantara, acusando a las estrellas, los delanteros presionaron. Los de anoche, sí.

LESIÓN DE GIOVANI

Hubo una jugada, aún en la primera mitad, que no saldrá en ningún resumen televisivo. No acabó en gol. Ni era un taconazo espectacular de nadie. Ni siquiera un despeje maravilloso. Pero Giovani corrió de punta a punta del campo para ayudar a la defensa y evitó un peligroso contragolpe del Alcoyano. Misión cumplida, pensó el joven mexicano. Y Rijkaard, también. A través de los pequeños detalles es como se reconstruyen los equipos. Aunque la debilidad del enemigo --el entusiasmo les duró apenas 45 minutos-- también ayudó.

Después, ya en la segunda parte, Giovani recibió una fuerte entrada en el tobillo izquierdo que le obligó a salir en camilla. Los médicos creen que la lesión es menos grave de lo que parecía. Para esos momentos ya estaba el bullicioso Bojan, que sustituyó a Henry. El niño tiene prisa por hacer las cosas. A él le da igual jugar en Getafe, Alcoi o en el Camp Nou. Quiere quedarse. Ayer, en 10 minutos, el otro noi de Linyola ya había creado un par de ocasiones. Bojan mete una velocidad más al juego, que obliga a sus compañeros a subirse al mismo tren. Si no, se quedan tirados en el andén.

MÁS DIRECTO

No es casual que el Barça fuera más directo con la entrada de Bojan. Al principio, guiado por un activo Xavi, se adueñó del balón sin apenas sufrir. Hasta que apareció Henry con un gol. La jugada fue hermosa, rápida y combinativa. Es verdad que los defensas del Alcoyano contribuyeron con su pasividad. Aunque tan solo tuvieron la oportunidad de mirar esa acción iniciada por Gudjohnsen --el islandés mejoró jugando de centrocampista--, prolongada luego por un exquisito taconazo de Xavi para que Henry se tirara al suelo, como hacía en sus tiempos del Arsenal, y batiera a un inocente Emilio.

ELIMINATORIA RESUELTA

En la primera parte, el Barça desgastó. En la segunda, liquidó con oficio la eliminatoria. Aún quedó corto el resultado porque Guddy falló varias ocasiones. Y el partido, que había sido plácido, se transformó casi en un choque de regional, con Carrión repartiendo patadas a diestro y siniestro, poniendo en peligro la integridad física de Giovani --se fue lesionado--- y de Bojan, a quien casi envia al hospital. Pero el niño es más listo que ninguno. Salvó las piernas, Carrión fue expulsado y Rijkaard se encaró, aunque después negó que le hubiera insultado como había denunciado el defensa. "Casi nos mata dos jugadores", se quejó, con una actitud agresiva. Igual es una señal del cambio.Como el Barça de anoche. Por lo menos, corrió y ganó y dejó la Copa olvidada hasta enero. Un problema menos. Ahora, queda resolver los que son importantes de verdad.