La eficacia de Pedro deja en evidencia a Henry

La eficacia de Pedro deja en evidencia a Henry

Guardiola tiene un dilema. Bendito dilema, pero una decisión dífícil en cualquier caso. El causante de la situación es Pedrito, un jugador que iniciaba la campaña como cuarto delantero en discordia y que en lo que llevamos de temporada no sólo se ha ganado la plaza como primer recambio del tridente atacante por delante de Bojan, sino que ha hecho méritos más que suficientes para disputarle a Thierry Henry la titularidad en la banda izquierda del ataque culé.

Sus números hablan por sí solos: con 14 goles en las seis competiciones que ha disputado el Barça, Pedro es el segundo máximo goleador del equipo por detrás de Messi y con un gol más que Ibrahimovic. Y sus tantos no son de relleno: ya en agosto, contribuyó decisivamente en el primer título de la temporada, marcando un gol y dando una asistencia a Xavi en San Mamés en la ida de la final de la Supercopa de España, poco ante de firmar su primer contrato profesional con el club. Dos semanas después, un gol suyo en la prórroga dio el segundo título del año: la Supercopa de Europa. Y otro tanto in-extremis permitió al Barça ganar en la prórroga el sexto título del glorioso 2009, el Mundial de Clubs de Abu Dabi.

Pedrito también ha dejado su sello en la Liga (con goles que dieron tres puntos, como el que marcó ante el Almería en el Camp Nou) y en la Champions.

Mientras tanto, Thierry Henry ha iniciado su tercera temporada en el equipo sin pena ni gloria: en 19 partidos disputados, ha logrado dos goles (ambos en Liga, ante el Mallorca en el Camp Nou y en el campo del Jerez). Si bien es cierto que el francés ha mostrado una notable mejoría en su juego en los dos últimos enfrentamientos antes el Sevilla, desbordando con facilidad a su compatriota Konko, sigue estando negado ante el gol.

El partido del sábado ante el Sevilla en el Camp Nou es una buena muestra de la contribución al equipo de ambos jugadores esta temporada: Henry participó en el juego y se mostró incisivo en el uno contra uno, pero sus centros no encontraron rematador (en parte, por la torpeza de Ibrahimovic) y sus disparos fueron inocentes. En su mejor ocasión, en la que Zlatan le devolvió el regalo, 'Titi' chutó al muñeco y Palop detuvo sin dificultad. En cambio, a Pedro le bastaron menos de diez minutos para cumplir sus estadísticas: cada dos ocasiones, un gol. En la primera, disparó flojo tras una pared con Abidal y se encontró con Palop; en la segunda, hizo una diagonal mortal y aprovechó un pase sensacional de Xavi para batir al portero sevillista con un delicioso toque.

De momento, Guardiola sigue confiando en Henry, pero Pedro se está cargando de argumentos para reclamar un sitio en el once. Y ahora que el reparto de minutos es menor tras la eliminación en la Copa del Rey, es más necesario si cabe alinear a los jugadores que mejor rendimiento ofrecen al equipo en cada partido. Si fuera por gran parte de la afición, que acoge con murmullos las acciones de Henry y ovaciona a Pedro cada vez que entra en el campo, no habría discusión.