LA SITUACIÓN AZULGRANA|EL PROYECTO DE FOSTER

La junta del Barça promete por escrito que la reforma del Camp Nou no la pagarán los socios

Emilio Péres de Rozas

La junta directiva del Barça se ha comprometido por escrito a que las obras de reforma y modernización del Camp Nou y su entorno no supongan ningún desembolso extra para los socios, preocupados inicialmente por la envergadura del proyecto que llevará a cabo el prestigioso arquitecto británico Norman Foster.

La junta barcelonista también asegura en el documento que el conjunto de la obra, de un coste inicial de 250 millones de euros, no afectará al presupuesto de la entidad y que todo el dinero que se obtenga de la recalificación parcial del Camp Nou se destinará a obras y no a fichajes."Nosotros nos preocupamos antes que el socio por el enorme desembolso económico que pueden suponer las obras que, si podemos, vamos a afrontar", explicó ayer a EL PERIÓDICO un destacado dirigente azulgrana, que confirmó que toda la directiva firmó el documento que garantiza que las obras, que empezarán en el 2009, no supondrán daño alguno a la economía del club y que no se pedirá ninguna derrama a los socios, cosa que sí hizo Josep Lluís Núñez en la primera ampliación del estadio. Entonces, el presidente azulgrana pidió a los socios que adelantaran las cuotas de cinco años para sufragar las obras.

Laporta y su junta consideran que una cosa es el club y otra muy distinta la reconstrucción del Camp Nou. De ahí que muchos de los directivos hayan tratado de explicar que se trata de "negocios separados".

ACUERDO SENSATO

Nadie sabe en estos momentos qué, cuándo y de qué manera podrá construir o reconstruir el Barça, pues todo depende del acuerdo con el Ayuntamiento de Barcelona y del nivel de recalificación que se apruebe. "Es evidente que esto no es Madrid y que aquí resulta poco menos que imposible lograr las cantidades que ha sacado el club blanco y, mucho menos, construir al nivel que se ha hecho allí", explicó el mismo directivo, que agregó: "El ayuntamiento está regido por un gobierno progresista y sospechamos que todo será mucho más sensato y se buscará, entre otras cosas, la mejora de la calidad de vida del barrio de Les Corts, en lo que el club también está de acuerdo".Jordi Hereu, alcalde de Barcelona, admitía recientemente: "A lo largo del próximo año trabajaremos en paralelo para que, al mismo tiempo que se define la renovación del Camp Nou, se abra la reflexión política y ciudadana sobre el futuro uso de las dos parcelas del Barça en las que están ubicados el Palau y el Miniestadi". La recalificación del suelo del club azulgrana ha de ser, según Hereu, "fruto de un pacto unánime de la ciudad".

EL NUEVO PALAU

En el pliego de las bases del concurso arquitectónico para la modernización del estadio también se advertía de que la obra formaba parte "de un proyecto de renovación más amplio", en alusión a la reordenación del entorno del Camp Nou, que incluye la demolición del Miniestadi, la construcción del nuevo Palau Blaugrana (para el que también se abrirá un concurso internacional) y la edificación de viviendas, oficinas y un hotel.

Es evidente que si la junta de Laporta no quiere gastar ni un solo euro del presupuesto ordinario para no vaciar la caja, el número de construcciones que afrontará la entidad dependerá de la cantidad que se obtenga de la recalificación de su entorno. "Es posible que obtengamos dinero para todo, pero si no es así habrá que priorizar y decidir qué queremos o podemos hacer", siguió informando la misma fuente.Es muy posible que la discusión sobre si el club está o no desprendiéndose de buena parte de su patrimonio existirá siempre y, muy especialmente, durante los meses de la negociación con el municipio y los vecinos.

Destacados miembros de la actual junta defienden que el club no se está desprendiendo de su patrimonio, "sino añadiendo valor al que ya tiene y, quién sabe, si agrandándolo con más activos inmobiliarios". Joan Franquesa, responsable de Patrimonio del Barça, dijo recientemente en TV-3: "Ponemos a disposición de la reordenación solo el 7% del patrimonio que tiene el club, que no se endeudará de ninguna manera y, mucho menos, por estas obras".