Penya Barcelonista de Lisboa

dimecres, de desembre 06, 2006

LA LIGA DE CAMPEONES/LA ESTRELLA QUE SIEMPRE CUMPLE


El último truco de 'Ronnie'

• El as brasileño, con otro tanto maravilloso de falta en el que burló por raso la gigantesca barrera alemana, completó una gran noche que inició inventando pases
MARCOS LÓPEZ/ El Mundo Deportivo/ Barcelona
Se sabía que le falta un gol, el que debe marcar algún día desde el centro del campo. Se sabía que es un tipo con palabra, pese a muchos desmemoriados.
En octubre, cuando Ronaldinho no era Ronaldinho, tomó asiento en el vestuario visitante del Camp Nou y dijo a este diario: "Cuando el equipo me necesite, estaré".
Llegó la noche del martes 5 de diciembre, teniendo a casi 96.000 personas por testigos, y el Barça lo necesitaba. Ronaldinho, que nunca ha dejado de ser Ronaldinho, estuvo. Y no de cualquier forma. Como solo sabe estar él. A lo grande.
Con un partido de libro, justo cuando el barcelonismo estaba angustiado, dejando huella con un fútbol sublime.A los tres minutos, dio su primer pase. ¡Con la espalda! ¡Sí! Con la espalda dejando la pelota para Gio.
El Barça jugándose la corona europea y Ronaldinho divirtiéndose como un niño en su casa de Porto Alegre.
A los cuatro minutos, taconazo para Gio. A los siete, un pase soberbio para Giuly que Gudjohnsen no llegó a rematar.
Y a los 13, ¡Dios mío!, a los 13 apareció el genio. Tenía que tirar una falta desde el borde del área. Ronaldinho miró a los alemanes, gigantes todos ellos, tipos que pasan del 1.90 m, y descubrió algo que nadie vio antes.
Tiró por debajo de esa barrera, flojita iba la pelota, burlándose del Bremen, guiándola la estrella con un mando a distancia hasta reposar en la red alemana."No sé si había soñado este gol, pero lo que ha hecho es bestial. Increíble", comentó asombrado Txiki Begiristain, el secretario técnico azulgrana, alucinado desde el palco.
Un poco más arriba, en la tribuna de prensa del Camp Nou, convertidos anoche en comentaristas de Antena 3 TV, dos viejos amigos suyos del dream team se quedaron también embobados. "Es un genio, los humanos piensan esas jugadas, pero no pueden hacerla. Él lo pensó y lo hizo. Como no puedo marcar por arriba, lo hago por abajo", contó Bakero. "Quería hacerlo y lo ha hecho. Impresionante", soltó Laudrup, mientras Bakero interrumpía para recordar que Rivaldo, en Milan, en San Siro, ya logró una maravilla de gol así.'
Guddynho' y 'Giulynho'
En el Camp Nou no se había visto algo así nunca. O, al menos, no se recuerda en los casi 50 años de existencia. Ronaldinho, un prodigio eterno, perpetuo.
Cada día trama algo nuevo la estrella. Igual levita sobre el césped para dibujar cuatro segundos mágicos ante el Villarreal con una chilena que da la vuelta al mundo que trama un tanto insólito con toda Europa alucinada. Los demás miraban, él inventaba.
Además, con la sonrisa perenne. No solo eso, también contagió a Gudjohnsen y Giuly, a quienes transformó en sus socios perfectos en la primera mitad.
Hubo momentos en que parecieron Guddynho y Giulynho.Ronaldinho, a lo suyo. Un pase con la espalda, un taconazo, un gol imposible y una asistencia a Giuly para empezar.
En la segunda parte, con el 2-0, pareció sestear, aunque dejó solos ante Wiese, el meta alemán, a sus dos amigos. Pero ellos se quitaron entonces el disfraz brasileño y no lo aprovecharon. Da igual.
En Alemania descubrieron anoche que existen los magos, personas irreales que habitan apenas en la imaginación. Como el gol de Ronaldinho.