El Barça no juega ante el Barça

El Barça no juega ante el Barça

Juan Cruz 03/04/2011

Con ese sentido común que parece sentido del humor Michael Robinson dijo anoche en Carrusel una de esas verdades que él dice como escribía Azorín: haciendo que lo difícil parezca fácil. Dice el sabio inglés que algo que beneficia al Barça es que no se tiene que enfrentar al Barça. En esta Liga anoche el Barça tuvo su última oportunidad de asumir esa hazaña, pues el Villarreal es el equipo que aquí se parece más al Barcelona. Y este Barça de amarillo sólo aguantó la primera parte figurando como equipo capaz de sortear el buen dibujo que dispone Guardiola. Detrás del equipo azulgrana hay ahora una tradición y una historia, y éstas se defienden por sí solas, sin nombres propios, a partir de una teoría que tiene la eficacia de las convicciones. Por eso, como también indicó Robinson, no necesita correr más de la cuenta para expresar su esfuerzo: el esfuerzo está en la mente, es lo que mueve el balón. Y por eso termina fresco, como si estuviera comenzando el partido. Faltan muchos jugadores titulares, pero la filosofía está en este equipo por encima de los nombres. Valdés fue fundamental; Thiago es una revelación asombrosa, y Mascherano se ha ganado la jefatura. Pero sus nombres propios se diluyen en la laguna brillante de este equipo que Guardiola ha cuidado como en su tiempo cuidaba los pases.