Penya Barcelonista de Lisboa

dissabte, de desembre 12, 2009

FC BARCELONA 1 - 0 RCD ESPAÑOL


El Barça gana un disputado derbi contra el Espanyol con un solitario gol de Ibrahimovic
Los de Guardiola ganaron un disputado partido sin Messi, ante un correoso Espanyol, y con un solitario gol de penalti dudoso (1-0)

El Barça no sufrió en exceso, pero sí se vio superado durante muchos minutos por su rival, un voluntarioso Espanyol, que llegó como tantas otras veces como víctima propiciatoria. Ganaron los azulgrana gracias a un discutido penalti transformado por Ibrahimovic que marcó su undécimo gol en la Liga y que sirve al Barça para continuar al frente de la clasificación en su último partido de 2009 en el Camp Nou.

El exceso de partidos en pocas fechas pasó factura a los azulgrana, eso y el hecho que el Barça cambió su manera de jugar y le dio más protagonismo a los apoyos en la medular de Ibrahimovic. De hecho, el sueco jugó muchos minutos en el centro del campo, buscando la posibilidad de crear espacios entre los dos centrales blanquiazules.

Sin Messi, lesionado, el Barça buscó la proyección por la banda de Pedro, que estuvo muy incisivo y dispuso de la mejor ocasión del primer tiempo cuando robó un balón a Chica y remató por encima del travesaño de Kameni (m.14). Como es habitual en los últimos derbis en el Camp Nou, el Espanyol se resguardó en exceso, sobre todo en la primera mitad.

Al equipo de Pochettino la posesión del balón apenas le duraba y el Barça intentó arrollar al rival. Pero le costó entrar en materia a los de Guardiola, demasiado impreciso y con un pase de más en muchas ocasiones. Además Kameni, que suele firmar buenas actuaciones en el Camp Nou, estuvo muy atento en un par de acciones de reflejos en los primeros minutos.

El primer aviso del partido lo dio el Espanyol, con una acción de Iván Alonso, y los blanquiazules remataron otra vez más, en el 15, en un gran disparo de Verdú que salvó Valdés. Eso fue todo lo que ofreció en el primer tiempo. El Barça construyó no desde Xavi e Iniesta, como es natural, sino a partir de Ibrahimovic y sus desmarques, con lo que el juego de los azulgrana ofrecía otros automatismos.

De hecho el sueco asistió en dos ocasiones que pudieron ser gol. Una a Henry (m.17) y otra a Maxwell (m.36), que hoy sustituyó a Abidal en el lateral izquierdo. Sin embargo, el primer gol llegó en un penalti transformado por el nueve del Barça en el minuto 38, tras una acción dentro del área de Baena sobre Xavi que fue muy protestada por los blanquiazules.

Cambió el panorama en el segundo tiempo con la entrada de Javi Márquez y de Callejón por parte del Espanyol. Salvo unos primeros minutos en los que Dani Alves (m.50 y m.53) aprovechó los espacios por su banda, los blanquiazules se hicieron con el control de la situación.

Con mucho desparpajo y las ideas muy claras, los de Pochettino, sin llegar a crear ocasiones de gol, empezaron a creer en sí mismos y crearon confusión al Barça, que no acababa de funciona y se mostró demasiado errático. Los azulgrana, que no tenían frescura física, recuperó sus opciones con la entrada de Keita como centrocampista.

A partir de entonces, sin brillo, el Barça al menos dejó de sufrir, frente a un rival que apuntaba, pero no llegó a disparar en toda la segunda mitad. Entró Bojan por Ibrahimovic, en el cuarto de hora final, pero los azulgrana no funcionaban en ataque y sólo tuvieron una ocasión clara que salvó Roncaglia bajo palos en el minuto 90.

Al Espanyol le queda el consuelo de haber plantado cara al todopoderoso Barça. Los locales apenas tendrán tiempo de reflexión, mañana viajan a Abu Dhabi para jugar el Mundial de Clubes.