LA CRISIS EN LA LIGA NO PUEDE AFECTAR A LA CHAMPIONS
Un Barça de dos caras
El equipo debe pasar página tras la decepción ante el Getafe. Deja el campeonato doméstico para volver al torneo europeo, donde ‘vuela’
La irregularidad está condenando al FC Barcelona. Los constantes altibajos que sufre el equipo están desquiciándole. Transita a trompicones por la Liga, ofreciendo una imagen que no corresponde al talento de la plantilla, y a velocidad de crucero por la Champions. Es un Barça de dos caras. Un Barça, pues, desconcertante, capaz de lo mejor y de lo peor. De ilusionar y decepcionar. De motivar y desengañar en un tiempo récord. No es, ciertamente, la mejor manera para que cuente con el apoyo unánime del público.
La sensación que le quedó a la afición después del inesperado 0-0 ante el Getafe el pasado domingo es que si el equipo hubiera querido, si se hubiera puesto las pilas cuando tocaba, ahora podría estar en lo más alto de la tabla clasificatoria. Ocurre que, por una cuestión u otra, las cosas no han rodado como quería el cuadro catalán, que seguramente ha pecado de confianza.
Así, cuando llegó a ponerse sólo dos puntos por debajo del Real Madrid (después de golear 5-1 al Levante en el Camp Nou), le invadió una sensación de seguridad que, al final, le ha traicionado. Desde entonces, en seis jornadas sólo ha ganado cinco puntos, mientras que el líder ha engrosado su cuenta con el doble, diez.Es inaudito, pero cuando más problemas ha tenido el Real Madrid (ha ganado 10 puntos de los últimos 18), el Barça sólo ha podido sumar 5 de esos 18, con lo que la diferencia actual vuelve a ser de siete puntos, la misma que logró el Madrid cuando se impuso 0-1 en el Camp Nou en el último encuentro del 2007. Los blancos acabaron el año con 41 y los barcelonistas con 34.
Pero ha llegado el momento de poner fin a este sufrimiento, de enderezar la nave, coger el timón con las dos manos y poner rumbo a los objetivos por lo que todavía se sueña: la Liga y la Champions.
Se puede, se puede
Sobre el papel, todo es posible. La Liga, aunque difícil, no es imposible si el Barça se empeña en sumar los 21 puntos que restan. En la Champions, con la clasificación para semifinales muy cerca, lo mismo. Quedarían dos partidos para llegar a la final, posiblemente contra el Manchester United, y si en el vestuario todo el mundo fuera en la misma dirección, no se podría descartar visitar la ciudad de Moscú el 21 de mayo.Todo ello, sin embargo, no será posible sin el apoyo de la afición. El cuadro barcelonista, hoy más que nunca, necesita el aliento de la grada para caminar con paso firme estos dos meses que quedan de competición.
Puede que parezca una temeridad que el equipo pida el apoyo del público, pero la situación es la que es y hay que creer hasta el final, mantener encendida la llama de la esperanza. Remar todos en la misma dirección. Arrojar ahora la toalla sería dar la espalda al equipo cuando éste sigue respirando.
El Barça, por orgullo, está obligado a reaccionar. Por lo menos, a dejarse todo lo que le queda sobre el campo. A vaciarse, a sudar la camiseta. Es lo que exige la afición. Luego se podrá hablar o no de títulos. Ahora, actitud.
En el torneo europeo, el equipo no conoce la derrota y en el Camp Nou suma cuatro triunfos en cuatro duelos
La evidente crisis por la que pasa el FC Barcelona en la Liga no puede ni debe afectar al equipo en la Champions. En esta competición el conjunto catalán es, junto al Manchester United, la única plantilla que no conoce la derrota en el máximo torneo continental. De hecho, tanto los de Old Trafford como los del Camp Nou arrojan una estadística idéntica a estas alturas de la campaña: Siete victorias y dos empates en los nueve partidos disputados y 17 goles a favor por 5 en contra.El FC Barcelona empezó con buen pie la liguilla en septiembre del 2007. Se impuso 3-0 al Olympique de Lyón. Luego sumó otro triunfo, en Stuttgart (0-2) y después un empate en Glasgow ante el Rangers (0-0).En el ecuador de esta fase ya dominaba el grupo con 7 puntos, empatado con el conjunto escocés. En el cuarto partido confirmó su condición de favorito al ganar 2-0 al equipo de Ibrox y tomó tres puntos de ventaja respecto a los escoceses, segundos clasificados. Y en la quinta jornada, a una del final, el Barça se aseguró de forma matemática la primera plaza tras empatar en Gerland ante el Olympique de Lyón (2-2). El cierre de la liguilla fue impecable. El Barça se impuso al Stuttgart por 3-1, después de remontar el 0-1 encajado a los tres minutos de juego. En el sorteo del 21 de diciembre el equipo quedó emparejado con el Celtic. Sobre el papel, un rival asequible, aunque en los enfrentamientos recientes el equipo de Glasgow había complicado la vida al Barça (le eliminó de la UEFA 2003-04). Pero los barcelonistas, que pegaron primero en el Celtic Park (2-3), demostraron que, en esta ocasión, acabarían llevándose la eliminatoria. En el Camp Nou, pese a marcar a los tres minutos, el duelo acabó con victoria mínima (1-0).Y en cuartos, la misma historia. Triunfo a domicilio (0-1 en Gelsenkirchen) y a esperar a resolver la ronda en casa, donde ha ganado los cuatro partidos jugados y sólo ha recibido un gol.En teoría, el Barça es el favorito para avanzar a ‘semis’.
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