Penya Barcelonista de Lisboa

dimarts, de maig 15, 2007

LAS 14 CLAVES QUE EXPLICAN LA CAÍDA DEL CAMPEÓN


¿Por qué se está regalando la Liga?

El Barça busca la manera de reaccionar en las cuatro jornadas que le restan al campeonato y conquistar el único título que le queda en juego


El Barça continúa su lento declive sin que parezca que exista fórmula alguna para cerrar el ejercicio con un punto de satisfacción para la hinchada.Tras el balón de oxígeno que supuso el triunfo de Anoeta, el equipo de Frank Rijkaard cerró la semana pasada noqueado en la Copa de manera humillante por el Getafe y atrapado en la Liga por un Real Madrid que en esta recta final está demostrando toda la energía que le falta a los blaugrana.Parece imposible que un equipo con un potencial tan inmenso como el blaugrana esté a punto de cerrar el curso en blanco -ya se sabe que las Supercopas suman cuando hay otros títulos grandes.El paso de los meses y de los partidos han dejado en evidencia una serie de errores que, encadenados, han llevado al Barça ha dilapidar todo su crédito conquistado a base de buen fútbol y resultados excelentes. Ronaldinho, Eto’o, Deco y compañía han muerto de éxito, valga el tópico. En la campaña en la que debían coronarse como los mejores del mundo han apuntado muchos de los defectos que padeció la ‘galaxias madridista’ hasta correr el peligro de convertirse en la versión blaugrana del mismo fenómeno.Los errores de planificación, la relajación, las subidas de ego y un exceso de manga ancha tras algunos síntomas preocupantes han comprometido el presente y el futuro de una plantilla que a principios de temporada anunció a los cuatro vientos que querían hacer historia pero que, al final, sufre cada vez que sale al terreno de juego, temeroso de un nuevo fiasco y sin fuerzas para poner solución.

AL MEJOR DE CUATRO

El empate frente al Betis, concedido de manera pusilánime en los últimos minutos del partido y que contrastó con la segunda remontada consecutiva del Real Madrid, acabó con la confianza de la ‘Gent blaugrana’ en su equipo.El único capital que le queda al Barça en la actualidad es su orgullo del campeón. Nadie le teme ya pues los rivales saben que en las segundas partes le flojean las piernas y la cabeza y muchas de sus estrellas desaparecen en combate.Desde el vestuario, Deco envió un mensaje optimista: comienza una nueva Liga en la que el que sea capaz de ganar los cuatro partidos que restan se llevará el título.

Los blaugrana apuestan porque el Real Madrid no será capaz de ganar sus cuatro partidos. ¿Y ellos? Ahí está la clave.


LAS CAUSAS DE LA CAIDA DEL CAMPEON


1) Pocas vacaciones a causa del Mundial y tras una temporada 2005-06 muy dura.Tras afrontar 57 partidos oficiales y 11 amistosos con el Barça, Ronaldinho, Deco, Márquez, Xavi, Iniesta, Gio o Puyol disputaron la Copa del Mundo, como los fichajes Thuram y Zambrotta.

2) La gira por Norteamérica condicionó la pretemporada y no se llevó a cabo la preparación idónea.Hoy día las giras son necesarias para la economía de los clubs. Pero la mala planificación de esta privó de horas de sueño y descanso a los futbolistas. Y algunos jugaron partidos sin apenas hacer un entrenamiento.

3) El Barça llegó a la final de la Supercopa de Europa sin tensión competitiva. La noche antes del partido, una amplia representación de la plantilla, piezas clave, estaban en la gala de la UEFA. El Sevilla les pasó por encima al día siguiente (3-0).El flamante campeón de Europa llegó a Mónaco corto de puesta a punto pero confiado en sus fuerzas tras ganar la Supercopa de España al Espanyol y vapulear (4-0) al Bayern en el Gamper. Un Sevilla concentrado en competir les hizo descender a la Tierra. Desde el vestuario se envió el discurso de que se había recibido el mensaje.

4) El entorno, pero también los máximos responsables del club, pecaron de prepotencia. El Barça iba a convertirse en el equipo de los siete títulos y el duelo de octavos frente al Liverpool fue definida como una ‘eliminatoria beat’ en las vísperas de la final del Mundial de clubs... que también se perdió. Un amplio sector del barcelonismo, en un estado de euforia basado en la calidad de la plantilla, fue justificando un tropiezo tras otro a la espera de unos éxitos que, a día de hoy y a punto de acabar el curso, no han llegado.

5) Más allá de la intensidad de los entrenamientos (es el mismo sistema de trabajo de las últimas tres temporadas) algunos jugadores como Ronaldinho se han ausentado en exceso de las sesiones de trabajo del grupo.El astro brasileño seguía un trabajo específico que necesitaba llevar a cabo para recuperar su mejor tono. Sin embargo, y pese a esa planificación personalizada, sus prestaciones físicas han bajado de una forma alarmante.

6) Las lesiones de Eto’o y Messi mermaron considerablemente el potencial ofensivo del equipo y obligaron a un sobreesfuerzo a Ronnie.Ronaldinho tuvo que asumir una mayor responsabilidad en ataque y el brasileño respondió marcando más goles que nunca y decidiendo muchos partidos. Así, Ronnie soportó una mayor presión y, por otra parte, Eto’o y Messi no pudieron llegar a punto a partidos decisivos como los del Liverpool.

7) Tras disfrutar de las vacaciones navideñas más largas de la Primera División, Ronaldinho, Deco y Márquez regresaron tarde.En unos casos de manera justificada, en otros sin justificación alguna, sus retrasos provocaron una primera convulsión que más tarde desembocaría en la peor de las crisis de la temporada de la que no se recuperaría el equipo.

8) Pese a las quejas de los jugadores porque no estaban bien físicamente y no se había planificado bien el trabajo de pretemporada, no hubo un stage de invierno, como sí había sucedido en algunas temporadas anteriores.En la campaña 2003-04, la primera de Frank Rijkaard, la plantilla se concentró unos días para trabajar el aspecto físico. La segunda vuelta del equipo fue espectacular y remontó hasta quedar segundo, muy cerca del título.

9) Eto’o dinamitó el vestuario con unas declaraciones explosivas en las que cargó contra el entrenador y algunos de sus compañeros.Nada fue igual desde sus declaraciones en Vilafranca. Sus diferencias con Rijkaard y con Ronaldinho quedaron al descubierto y sumieron a la entidad en su peor crisis desde las elecciones del verano de 2003.

10) La reacción de la directiva fue tibia al principio y contemporizadora después, dejando al técnico sin ascendiente moral sobre los jugadores en aras de la autogestión. Una autogestión que, al final, no reanimó las constantes vitales del equipo.Todo el mundo consideró que la crisis se había cerrado de manera rápida y modélica con el objetivo de centrarse en la conquista de los títulos, pero los fiascos en la Champions y la Copa y el bajo tono en la Liga corroboran cuestionan la idoneidad de la solución.

11) Excepto Víctor Valdés (y Jorquera cuando jugó) y Carles Puyol, el resto de los defensas en nómina han tenido, globalmente, una trayectoria muy por debajo de campañas anteriores en unos casos, o no han estado a la altura de las expectativas de su fichaje.A Rijkaard le ha sido imposible encontrar una pareja de centrales fiable; y en los laterales, aunque cuenta con cinco alternativas, tampoco ha conseguido la fórmula adecuada. Pese a todo, los treintañeros Sylvinho, Gio y Belletti han renovado.

12) La posición del medio centro o pivote defensivo, fundamental en el Barça campeón, es un calvario para los técnicos. Las lesiones y la baja forma de las opciones con las que cuentan en la plantilla obligaron a recurrir a otras fórmulas (‘los tres pequeños’) que sólo funcionaron en partidos muy específicos.Motta y Edmílson han sido los más utilizados, pero Márquez, Xavi o Iniesta también han pasado por esa demarcación e incluso en algunos partidos se llegó a cambiar el dibujo del 4-3-3 al 3-4-3. Funcionó en la Copa frente al Zaragoza y pocas veces más. La conclusión más evidente es que de cara a la próxima campaña el Barça necesita recursos de garantías para una demarcación que es clave.

13) El Barça ha mostrado una sorprendente falta de carácter en un conjunto campeón en los partidos clave frente a los rivales directos (Sevilla, R. Madrid, Valencia, Inter de Porto Alegre, Chelsea, Liverpool...) que al final también se manifestó contra rivales más asequibles (Getafe en la Copa, Betis en la Liga...).Si en las dos temporadas anteriores el Barça se convirtió en un conjunto temible por su despliegue físico y técnico, pero también por su espíritu ganador, en la actual ha perdido casi todos los duelos directos.

14) El rendimiento de los últimos fichajes ha sido, en líneas generales, pobre. El club descartó la posibilidad de reforzarse en el mercado de invierno pese a la baja de dos de los cracks de la plantilla y tener a tiro una opción como Larsson. El Manchester Utd., en unas circunstancias similares, sí lo hizo. Todo ello siembra muchas incógnitas sobre el porvenir cuando se afronte la necesaria reestructuración de la plantilla para la próxima campaña.Los dirigentes del Barça deben tomar en las próximas semanas decisiones trascendentales en el capítulo de altas y bajas. Unas decisiones que no tendrían que estar condicionadas por lo que suceda con la Liga.