Penya Barcelonista de Lisboa

dissabte, d’octubre 21, 2006

Escalfant motors per diumenge (4)


El socio que aplaudió a Ronaldinho se arrepiente. Emilio Pérez de Rozas. Barcelona


Fue una broma, de esas en la que, con imitador o sin él, todo el mundo cae. El Larguero llamó a Juan Sánchez, socio del Real Madrid desde hace 27 años, propietario del restaurante Los amigos en La Rozas y el caballero --así lo catalogó toda la prensa española el pasado 20 de noviembre-- que, en compañía de su hijo, bufanda merengue anudada al cuello, rindió un cálido aplauso a Ronaldinho por su tercer gol en el Madrid-Barça (0-3) del año pasado.

El redactor de la SER se hizo pasar por un miembro del gabinete de presidencia del Real Madrid. Y le pidió "encarecidamente" que intentase no repetir aquel aplauso ni aquella escena "aunque vuelva a marcar Ronaldinho". "Descuide", le dijo Juan Sánchez al supuesto ejecutivo blanco. "No volverá a suceder. Ya me he arrepentido suficientes veces como para volver a aplaudir a Ronaldinho. Sé que me excedí y no se preocupen, que aprendí la lección y no volveré a hacerlo".Sánchez, que aseguró haber rechazado una invitación de TV-3 para presenciar el próximo Barça-Madrid "con fin de semana incluído", olvidó contar que, 48 horas después de aquella sentida ovación, reconoció que aquel aplauso le había salido "de dentro". Y lo explicó. "Merecía la pena aplaudir --dijo entonces Juan Sánchez-- porque, cuando un equipo juega al fútbol como el Barça y uno de sus jugadores hace lo que hizo Ronaldinho, no hay más remedio que aplaudir".

Ramón Calderón, presidente del Madrid que estaba en los estudios de la SER, reconoció que Sánchez había hecho "lo que sentía en aquel momento y, luego, cuando le criticaron tal vez se arrepintió". Calderón dio a entender que él sí entendió aquella ovación. Incluso pareció justificarla. Ahora es el presidente y, si se repitiese, seguro que se lo tomará de otra manera.