Messi... hasta en las malas
Messi... hasta en las malas
Los dos entrenadores sorprendieron con novedades en sus alineaciones iniciales · El argentino falló varias ocasiones claras, pero acabó decidiendo al aprovechar una asistencia de Adriano · Primera victoria de Guardiola en Mestalla desde que es entrenador
El Barcelona logró en Mestalla una victoria clave para el devenir de la Liga. Un gol de Messi decidió un partido en el que el Valencia jugó de tú a tú con los culés y en el que el Barça sufrió hasta el último instante. Los de Pep duermen a 10 puntos del Real Madrid.
No está acostumbrado el Barça a sufrir tanto para sacar los partidos adelante. Le costó lo suyo a Guardiola obtener su primera victoria como entrenador en Mestalla. Mucho tuvo que ver la entrega del Valencia y el planteamiento de Emery.
Y es que el técnico che se la jugó con un 11 atípico, sin la presencia de un delantero puro como Soldado. Ganó presencia en el centro del campo y le puso trabas a la creación del Barça. Algo debía olerse Guardiola porque también innovó en su equipo. Dejó a Pedrito en el banquillo, puso a Busquets de central y a Adriano y Mascherano en el centro del campo con Xavi e Iniesta. Básicamente, pasó del 4-3-3 habitual a un 4-4-2.
El tapón che
En ese duelo de experimentos se sintió mejor el Valencia, que empezó ahogando la salida de balón barcelonista. Aún así, las mejores ocasiones fueron para el Barça. Messi dispuso de dos oportunidades clarísimas para adelantar a su equipo, pero estuvo inusualmente fallón.
Tuvo una buena el Valencia, pero Iturralde la anuló por fuera de juego. Mata asistió entre lineas a Jordi Alba y éste, cuando el árbitro ya había pitado, acabó la jugada con un gol. Incluso con la repetición, es una jugada difícil de ver, aunque parece que el valencianista estaba un poco adelantado.
Poco a poco el Barça empezaba a encontrar su juego, pero justo le llegó el descanso. Le vino bien al Valencia para recuperar energías y volver con su presión asfixiante.
Adriano marca la diferencia
Los de Emery dispusieron de un buen par de ocasiones en las botas de Pablo, pero se quedaron a las puertas del gol. Lo mismo parecía que le iba a pasar a Messi, hasta que Adriano decidió echarle una mano. El brasileño sorprendió en una internada por la izquierda para asistir a La Pulga en el área. A punto estuvo de sacársela Guaita, pero el balón entró llorando.
El resto del partido fue un intento del Valencia de restablecer el empate. Los catalanes aguantaron como pudieron y lograron tres puntos decisivos. Guardiola logra su primera victoria como entrenador en el feudo valencianista y, lo más importante, su equipo duerme a 10 puntos del segundo.
El Barcelona logró en Mestalla una victoria clave para el devenir de la Liga. Un gol de Messi decidió un partido en el que el Valencia jugó de tú a tú con los culés y en el que el Barça sufrió hasta el último instante. Los de Pep duermen a 10 puntos del Real Madrid.
No está acostumbrado el Barça a sufrir tanto para sacar los partidos adelante. Le costó lo suyo a Guardiola obtener su primera victoria como entrenador en Mestalla. Mucho tuvo que ver la entrega del Valencia y el planteamiento de Emery.
Y es que el técnico che se la jugó con un 11 atípico, sin la presencia de un delantero puro como Soldado. Ganó presencia en el centro del campo y le puso trabas a la creación del Barça. Algo debía olerse Guardiola porque también innovó en su equipo. Dejó a Pedrito en el banquillo, puso a Busquets de central y a Adriano y Mascherano en el centro del campo con Xavi e Iniesta. Básicamente, pasó del 4-3-3 habitual a un 4-4-2.
El tapón che
En ese duelo de experimentos se sintió mejor el Valencia, que empezó ahogando la salida de balón barcelonista. Aún así, las mejores ocasiones fueron para el Barça. Messi dispuso de dos oportunidades clarísimas para adelantar a su equipo, pero estuvo inusualmente fallón.
Tuvo una buena el Valencia, pero Iturralde la anuló por fuera de juego. Mata asistió entre lineas a Jordi Alba y éste, cuando el árbitro ya había pitado, acabó la jugada con un gol. Incluso con la repetición, es una jugada difícil de ver, aunque parece que el valencianista estaba un poco adelantado.
Poco a poco el Barça empezaba a encontrar su juego, pero justo le llegó el descanso. Le vino bien al Valencia para recuperar energías y volver con su presión asfixiante.
Adriano marca la diferencia
Los de Emery dispusieron de un buen par de ocasiones en las botas de Pablo, pero se quedaron a las puertas del gol. Lo mismo parecía que le iba a pasar a Messi, hasta que Adriano decidió echarle una mano. El brasileño sorprendió en una internada por la izquierda para asistir a La Pulga en el área. A punto estuvo de sacársela Guaita, pero el balón entró llorando.
El resto del partido fue un intento del Valencia de restablecer el empate. Los catalanes aguantaron como pudieron y lograron tres puntos decisivos. Guardiola logra su primera victoria como entrenador en el feudo valencianista y, lo más importante, su equipo duerme a 10 puntos del segundo.
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