Valdés: "Ganar títulos es adictivo, nunca cansa"

Valdés: "Ganar títulos es adictivo, nunca cansa"
Dos veces portero menos goleado en la Liga, va camino de repetir la gesta mientras sigue adornando su palmarés con títulos "En el futuro todos los equipos querrán que el portero forme parte del sistema ofensivo" "Guardiola me ha enseñado la parte atractiva del fútbol,a pasármelo bien jugando"

Vivir bajo el marco del Barça es un ejercicio de alto riesgo, pero después de toda una vida en el club Víctor Valdés (l´Hospitalet, 14/ I/ 1982) se ha habituado a ser centro de todas las miradas. Dos veces portero menos goleado en la Liga, va camino de repetir la gesta mientras sigue adornando su palmarés con títulos. Tres Ligas, dos Champions... No se cansa de ganar, y mañana vuelve a lanzarse a por su Copa preferida, la de Europa.

¿Cómo ve al Stuttgart?
Tienen mucho peligro a balón parado, a nivel físico siempre son jugadores muy potentes pero confío en que todo vaya bien, que sea una eliminatoria disputada pero que el Barça la gane.

¿La derrota del Madrid en Lyon les sirve como aviso?
En la Champions hay que ir con mucho cuidado. Si un equipo pasa a octavos como el Stuttgart es por méritos propios, nadie le ha regalado nada, y tenemos que tener el máximo respeto hacia ellos y ser conscientes de que será un equipo muy fuerte.

¿Qué destaca del Stuttgart?
Supongo que estará en la línea de cuando nos enfrentamos a ellos (2007-08) pero ahora sin Mario Gómez (delantero). Llegando mucho por banda, intentando aprovechar las jugadas a balón parado y en defensa, muy ordenados y con un buen portero.

Que se dispute la final en el Bernabeu ¿supone una motivación extra?
Para los que somos de aquí, sí. Tiene el valor añadido de jugar en el campo del máximo rival. Pero a nivel deportivo no significa nada más que otras veces. Es una final de Champions y hay que intentar alcanzarla independientemente de dónde se juegue.

Usted ya tiene dos Ligas de Campeones. ¿Cansado de ganar tanto?
No. Quiero tener muchas más. Cada año que juego la Champions quiero terminar ganando la Copa y levantándola otra vez. Porque es una competición muy bonita y también porque las sensaciones que vives cuando has levantado la Copa de Europa o cualquier otro título importante se convierten en adictivas y quieres volver a vivirlas. Nunca cansa ganar. Es adictivo. Nunca digo ´ya tengo bastante´. Quiero más.

Acaba de superar a Sadurní en número de partidos de Liga jugados. Por delante sólo tiene a Ramallets y Zubi.

¿Qué significa para usted estar en el podio de porteros del Barça?
Es un orgullo haber superado a mitos de la historia del Barça como Sadurní, Urruti o Artola, que para mí fueron referentes al llegar al primer equipo. La trayectoria de Zubi sigue siendo un referente muy importante y para mí es un reto superar esos números.

Va camino de récord...
Me gusta ir paso a paso. Voy con mucho cuidado en todo. Pero sí es verdad que es un reto intentar superarlo. Yo valoro la continuidad, la regularidad, aunque primero es la confianza que me han dado todos los entrenadores que he tenido, desde el primero hasta el último, porque sin esa confianza no puede existir esa regularidad. Además, valoro mucho los números que ha hecho el equipo en las últimas temporadas y sobre todo los títulos que hemos ganado, que es lo que a mí me queda del fútbol.

¿Es más complejo ser portero del Barça que de otro club?
Por la forma de jugar del equipo, tal vez sí. El portero del Barça tiene un riesgo añadido que debe asumir en cualquier momento. Es un reto muy bueno. Sobre todo porque una vez superado ese riesgo te das cuenta de que ha sido algo positivo para el equipo.

Es llamativo que en un equipo tan ofensivo el portero haya adquirido una importante cuota de protagonismo...
Es por el riesgo del que hablo. El míster nos hace trabajar muy bien el sistema y nos hace formar parte de esta transición ofensiva. Todo comienza en la portería. Es algo muy positivo porque llegas a disfrutar del partido jugando a fútbol. A veces un portero sólo disfruta cuando le llegan, pero formar parte del juego también es bonito.

¿Esto revaloriza el puesto?
Creo que sí. Y creo que el futuro de la portería en el fútbol mundial pasa por aquí. Todos los equipos acabarán intentando que el portero forme parte del sistema ofensivo porque es muy positivo.

¿Qué le proporciona más alegría, salvar un gol cantado en un uno contra uno o celebrar un gol de su equipo?
Las dos cosas. Son los momentos más buenos para un portero. Cuando haces bien tu trabajo y cuando el equipo marca, porque tú también formas parte de esa transición ofensiva.

¿Y cómo celebra los goles?
Soy una persona bastante impulsiva. Como estoy allá solo intento vivirlo de forma especial, aunque siempre hay algún central al que te puedes abrazar.

¿Cómo mantiene la ilusión un equipo que ya lo ganó todo?
Primero, con un cuerpo técnico y un entrenador que no dan pie a ningún tipo de relajación. Al contrario, intentan hacerte asumir cada día nuevos retos y mejorar. Por otra parte, cuantos más títulos ganas vives sensaciones que mucha gente no tiene la oportunidad de vivir en el mundo del fútbol. Esto lo valoras y quieres volver a vivirlas.

Tras cien partidos como su técnico, ¿qué es lo que más le sorprende de Guardiola?
A mí el míster me ha enseñado a ver la parte atractiva del fútbol y a intentar pasármelo bien jugando, siempre desde una seriedad. Como entrenador diría que es un enfermo de fútbol, lo vive mucho todo y creo que lo ha demostrado con las cosas que ha conseguido. Como técnico tiene unos conocimientos de fútbol impresionantes, siempre te sorprende con cosas nuevas, informaciones que te da y cosas que has de mejorar.

¿También a un portero le da información adicional?
Sí. Amímeha enseñado muchísimas cosas. Me doy cuenta, partido tras partido, que cada vez me lo paso mejor.

Juan Carlos Unzue (entrenador de porteros) es muy importante para usted. Si llega a dejar el club a final de temporada, ¿sería una gran pérdida?
Sí, seguro. Para mí ha sido un padre deportivo desde que me cogió. Ya hace siete años que estoy con él. Aparte hemos vivido juntos momentos buenos, momentos no tan buenos y momentos muy malos. Sin duda, mi proyección en estos años de profesional se la debo a él. Sin él, y sin la confianza de los entrenadores, no hubiera podido llegar donde estoy.

De todas formas, entiende que pueda aspirar a crecer...
Sí, porque le conozco muy bien y también es un enfermo de fútbol. Creo que será un entrenador muy bueno, seguro.

¿Las lesiones han afectado a la confianza del equipo?
No. Se ha hablado mucho desde fuera, pero desde dentro sólo le damos la importancia que tiene que un compañero no pueda jugar. Sientes lástima por él, es una pena. Nada más.

No ha habido miedo, ni inseguridad, ni inquietud...
No. Nosotros no. Desde dentro sabemos que el fútbol tiene estas cosas. Ya lo hemos vivido años atrás, puede pasar que tengas esas rachas de lesiones.

El Bernabeu se ha cruzado en la trayectoria del Barça con la final de Champions y con ese partido de Liga que para muchos resultará decisivo. ¿Lo será tanto?
Si llegas con una renta de puntos escasa, siempre es decisivo el partido de vuelta del clásico. Igual que todos los que tendremos durante la segunda vuelta, pero siempre el clásico es especial por todo lo que le rodea.

Son dos equipos prácticamente antagónicos. ¿Qué decidirá cuál es el mejor?
Pequeños detalles, sobre todo en partidos en que nos enfrentemos entre nosotros. Pequeños detalles hacen que el partido se decante hacia un lado u otro. Tal como está de puntos, esta Liga se decidirá de esta manera.

¿Entre esos detalles figura, a la hora de la verdad, la mayor identificación con el equipo de los jugadores de casa?
No. Creo que todos los jugadores dan el plus que tienen que dar. Sean de fuera o sean de aquí. A los que vienen de fuera les hacemos saber lo que significa el Barça para mucha gente y el míster se encarga de transmitirles lo que quiere a nivel físico, táctico, a nivel de todo. Todos los jugadores tienen el mismo tono.

¿Alguna cosa le gusta especialmente del Madrid respecto a otras temporadas?
Como siempre, tienen una efectividad muy buena. Han pasado un momento de falta de acoplamiento que es normal después de tantas altas... El gran peligro del Madrid es que son muy efectivos.

¿En qué le ha cambiado la paternidad? (Lleva tatuado en el antebrazo derecho, en grandes caracteres, el nombre de su hijo, Dylan, y la fecha de su nacimiento, 20/ 8/ 09.)
Sobre todo en que te cambian las prioridades. Tu hijo se convierte en la prioridad. Estoy encantadísimo. Es algo que nunca pensé que podía llegarme y me ha llegado y estoy ilusionado, como un niño. Tener a mi hijo a mi lado es una sensación impresionante.

El otro día fue al teatro a ver a Gabino Diego, ¿de dónde le viene esta afición?
Tenemos un amigo en común que es mi preparador, Xavier Martos, y nos salió la ocasión de ir a verle. Me encanta el humor, soy mucho de monólogos, de este tipo de obras, y la verdad es que la recomiendo (ayer se despidió de Barcelona). No es porque tenga amistad con Gabino, sino porque te lo pasas muy bien.

¿Qué otras pasiones ocultas tiene?
Me gustan el windsurf, el kitesurf, muchas cosas relacionadas con el mar. Estar al lado del mar es una de mis grandes pasiones.

Al contrario de Puyol, que es más de montaña.
(risas) Cada uno tiene lo suyo e intenta pasar su tiempo libre como puede. Amí, siempre que tengo un ratito, me encanta vivir momentos en el agua.

¿Qué quiere ser de mayor?
Me haría mucha ilusión estar al lado de niños. Si puede ser con pequeños porteros, intentando pasármelo bien con ellos y haciendo cosas juntos. Me encantaría hacer cosas de fútbol base encaminadas específicamente a la portería.

No le seduce ser entrenador.
De momento, no. Me gustan más los niños.

En el banquillo se sufre mucho.
(risas) Creo que sí, sí, sí...