R. SOCIEDAD, 0 - FC BARCELONA, 2

El Barça se afianza como líder al imponerse a la Real Sociedad (0-2)

Pase de Ronaldinho, golazo de Iniesta. Pase de Ronaldinho, golazo de Etoo. Así, explicado fríamente, parecería que hasta ha sido fácil, coser y cantar, el valioso triunfo del Barça en Anoeta.

Y si lo ha sido se debe a las genialidades del brasileño, que ha transformado la visita a San Sebastián en un maravilloso catálogo de asistencias. Detrás de esos dos fantásticos pases queda oculta, sin embargo, una mediocre primera mitad, resuelta con autoridad tras el descanso.

Algo debió de decirles Rijkaard. Algo serio porque el Barça no era el mismo. Y así, rescatando la esencia de un juego que tenía prácticamente perdido, el líder se irá a dormir con la conciencia tranquila.Le da igual lo que pase mañana en el Bernabéu. Ellos, los campeones, jugaron, especialmente en la segunda mitad, a un nivel muy alto, teniendo en cuenta lo que había ofrecido hasta ahora. Recuperada, por necesidad (la lesión de Deco lo obligó), la figura del medio centro defensivo, el Barça pareció más equilibrado en la primera mitad.

No tanto por lo que hizo Edmilson, el futbolista elegido por Rijkaard para desempeñar esa ingrata tarea, sino porque el equipo no salió dormido. No tuvo mucho remate, pero al menos no se despistó nada. El inicio del partido fue bueno.

El balón no iba demasiado rápido, aunque el control del encuentro era totalmente azulgrana, con Etoo jugando de extremo izquierdo y Ronaldinho de delantero centro. O sea, las piezas cambiaron de sitio. Samuel en la banda; Ronnie, disfrazado de falso nueve. Falso porque no estaba en el área sino que huía de ella para enredar a los dos centrales de la Real Sociedad.Gol anulado a XaviY así, poco a poco, con un gol anulado a Xavi (min 5), convertido anoche en el delantero más peligroso, el Barça creía tener el partido en la mano. El partido, sí; el marcador, no.

Hubo unos minutos de desfallecimiento, lógicos porque no veía rendija alguna en el muro construido pacientemente por Miguel Ángel Lotina, el técnico de la Real. Estaban todas las puertas cerradas, con Messi engullido al otro lado de la pared --sin noticias de Leo--, y Etoo corriendo sin desfallecer. Un pase, un genial pase de Ronaldinho a Xavi, dibujó una jugada sensacional, pero la mano derecha de Bravo impidió el tanto azulgrana. La Real se asustó. Dio un par de pasos atrás, si se descuida acaba en la playa de La Concha, y desnudó aún más la falta de chispa que ahogaba al campeón.Sabido es desde hace meses que el Barça es otro, como si su esencia se hubiera quedado en París, pero dolía verle en la primera mitad sin energía.

Con actitud, ganas, compromiso, pero poco fútbol. Y nada de magia. ¿Perdón? El partido empezó igual en la segunda parte. Pero al primer minuto, Messi agarró la pelota en campo del Barça, se olvidó de jugadas maradonianas, y descubrió a Ronaldinho, ya en terreno donostiarra. Entonces, no se sabe de dónde, apareció la magia perdida.

O, tal vez, fuera más sencillo. O tal vez fuera que Ronaldinho se libró de la mala fotocopia que le ha acompañado toda la temporada y rescató su disfraz más auténtico. Miró al horizonte, oteó a Iniesta entre las rayas azules y blancas de los defensas de la Real, activó su GPS, sirvió un majestuoso pase y después se puso a mirar.

Porque lo que hizo Iniesta es para mirar y, sobre todo, admirar. Con una velocidad insólita --a veces la gente cree que Andrés nunca corre, solo camina--, se coló entre los defensas, quebró a Bravo, el meta de la Real, con un astuto golpe de cintura, como si fuera Ronaldo, el verdadero, el extraterrestre que pasó por el Camp Nou, y marcó Iniesta un gol fantástico. Festejado como si valiera realmente una Liga. Igual lo vale.Etoo alivia el sufrimiento A Ronaldinho le dio por pegar botes por Anoeta, como hace un año, en el glorioso mayo del 2006 en Saint Dennis, celebrando la Champions. Pero no, no era eso lo que hacía volar al brasileño. ¿Celebraba un gran pase? Tampoco. Celebraba haberse reencontrado consigo mismo, como demostró al final del partido con un pase galáctico para que Etoo marcara y diera calma al Barça con un triunfo que espanta la angustia.

FICHA

Real Sociedad: Bravo; Mikel González, Juanito, Víctor López, Garrido; Garitano (Diego Rivas, min 63), Aranburu, Savio, López Rekarte (Díaz de Cerio, min 60), Xabi Prieto (Estrada, min 75); y Kovacevic.

Barça: Valdés; Gio, Puyol, Thuram, Zambrotta; Edmilson, Iniesta (Gudjohnsen, min 85), Xabi, Ronaldinho, Messi (Oleguer, min 90); y Etoo.Goles: 0-1 (min 47), Iniesta. 0-2 (min 87), Etoo.

Árbitro: Teixeira Vitienes (Cantabria). Amonestó con tarjeta amarilla a Garitano, Víctor López, Garrido, Mikel González y Edmilson.