Penya Barcelonista de Lisboa

diumenge, d’abril 15, 2007

Rijkaard sale a poner paz en el Barça


Rijkaard sale a poner paz en el Barça
• El técnico arropa a Ronaldinho, recupera a Etoo, defiende a la plantilla y exige una "reacción"

Con un tono pacificador y divulgando un discurso elogioso para arropar a Ronaldinho ("Ha estado enfermo, es una cosa seria", dijo ayer), Frank Rijkaard intentó desactivar, de forma cuidadosa, todas las polémicas que han salpicado al equipo.

Al técnico no se le oyó ni un solo reproche hacia la plantilla --"Quiero defender a este grupo, ha conseguido mucho, no se puede perder todo en un día o en un momento", explicó-- y calificó el partido de esta tarde contra el Mallorca "como uno de los más importantes de la temporada".

Con Ronaldinho en la grada y Etoo en el campo.No hay forma de que coincidan ambas estrellas. Hace una semana jugó el brasileño, mientras el camerunés, con tendinitis, se quedó en casa. Hoy Ronaldinho trabajará en solitario y Etoo será el delantero centro titular del equipo.

Desde esa derrota en Zaragoza, el Barça se ha ido fracturando. Ayer, con una paciencia franciscana, ajeno al ruido que agita el Camp Nou, Frank Rijkaard cogió el pegamento para unir todas esas piezas rotas. Él sigue pensando que hay solución. Que nada se ha roto para siempre. Ni la convivencia del vestuario. "El equipo está unido y comprometido tal y como ha trabajado esta semana", reveló Rijkaard.

OLEGUER, DESCARTADO

Nada le ha alterado. Ni la misteriosa semana de Ronaldinho, con amigdalitis y fiebre, en el gimnasio, ni el cambio de régimen en la gestión de la plantilla anunciado por Eusebio Sacristán, uno de sus ayudantes, y rebatido después por algunos jugadores públicamente: Belletti, a quien Rijkaard convocó ayer sin guardarle rencor alguno, y Giuly.

Entre tanto alboroto, Rijkaard se ha mantenido al margen. Más encima de los jugadores que nunca en los entrenamientos, sin alzar la voz, solo corrigiendo detalles tácticos, y tomando decisiones drásticas. La de Ronaldinho, sin ir más lejos. Otras menos relevantes (ayer descartó a Oleguer).

"AUTOCRÍTICA DEL STAFF"

Le disculpó, eso sí, porque viene de un Mundial, de una pretemporada en la que jugó "amistosos" sin tener la forma. "Ha sido determinante en muchos partidos, cuando no estaban Etoo y Messi. Cada cuerpo tiene sus límites y a veces no puedes más, no tiene más fuerza".

A propósito de la imagen de desgobierno que proyecta la plantilla, Rijkaard fue contundente: "Desde que he estado aquí, nunca he tenido la sensación de tener completamente controlado el vestuario". El holandés negó cisma entre los técnicos y los jugadores por las declaraciones de Eusebio sobre la nueva forma de gestionar el grupo. "No han hecho ningún daño. Si tenemos que apuntar con el dedo, lo hacemos a nosotros mismos. Es una forma de autocrítica".

En una semana delicada para el Barça, Rijkaard terminó por culparse a sí mismo: "Echaremos de menos a Ronaldinho, hay que reaccionar sin él".