Tumbado boca abajo, con la mirada perdida y acogiendo el balón en su regazo, Petr Cech quedó el sábado aturdido. Conmocionado. La rodilla derecha de Stephen Hunt, el delantero del Reading, que no levantó la pierna como se acostumbra, había dejado su huella en el cráneo del meta del Chelsea a los 20 segundos de partido. Salió en camilla del estadio y acabó en el quirófano del hospital Radcliffe de Oxford, donde fue intervenido ayer con éxito de una fractura craneal, según informó el club inglés en su web oficial. No se precisa, sin embargo, el tiempo que Cech permanecerá de baja, aunque no podrá jugar, obviamente, el miércoles contra el Barcelona.Un grave problema para el técnico Jose Mourinho, quien desconoce aún si el italiano Carlo Cudicini, el guardameta suplente, estará recuperado de la conmoción cerebral que sufrió el sábado. En un encuentro, el Chelsea perdió a sus dos porteros y le queda tan solo el recurso de Hilario, un meta portugués que no ha debutado aún con el equipo inglés. En el caso de Cech, rozó el drama. "Ha tenido suerte de estar vivo", gritó Mourinho, tras el sufrido triunfo sobre el Reading (0-1), con autogol del islandés Ingimarsson.En ese instante, el meta checo, de 24 años, estaba ya en una ambulancia camino del hospital. Desconocía el técnico que Cech terminaría en el quirófano para ser operado de "un hundimiento del cráneo", según el escueto parte médico facilitado ayer por el club inglés. "Es demasiado pronto para decir cuándo podrá volver", añadió el Chelsea sobre Cech. Y fiel a su oscura política de información, el club tampoco dio datos sobre el estado físico de Cudicini.
QUEJA A LA FEDERACIÓN
El meta italiano (33 años) también estuvo durante horas hospitalizado en la noche del sábado al domingo. Pero Cudicini no tuvo que quedarse a dormir porque los médicos le permitieron volver a casa, a pesar de que abandonó el Madejksi Stadium de Reading con respiración artificial, un collarín en el cuello y la cabeza inmovilizada después de ser atendido durante más de 10 minutos en el césped. Inicialmente, parecía bastante más grave la lesión de Cudicini que la de Cech. Pero las exploraciones de los médicos en Oxford confirmaron las palabras de Mourinho.El Chelsea, siguiendo las consignas de su entrenador, indignado con la actitud de Hunt, ha enviado un escrito de denuncia y queja a la federación inglesa tras revisar el vídeo de las dos jugadas. En su página web oficial, junto al parte médico de Cech, se ofrece una secuencia de la jugada, con cuatro imágenes capturadas de la televisión, en las que se aprecia el brutal impacto de la rodilla derecha del delantero del Reading sobre la parte izquierda del rostro del meta checo cuando éste ya tenía la pelota en su poder. "El jugador ya estaba demasiado lejos. No podía llegar", se quejó Mourinho. Y con razón. Es de ese tipo de jugadas en los que el portero tiene mucha ventaja y los delanteros evitan con un salto el impacto. Pero Hunt no levantó la pierna y Cech acabó en manos de neurocirujanos que le operaron del hundimiento craneal.
A PUERTA CERRADA
Ayer, en una sesión de entrenamiento realizada a puerta cerrada, el Chelsea inició la preparación del choque contra el Barça. Con la duda de Ashley Cole, el lateral izquierdo áá que arrastra unos problemas en el tobillo, y con la baja de Cech, postrado en la cama de un hospital, sintiendo, como dijo Mourinho, que había vuelto a nacer. "No estoy preocupado por el Barça, el fútbol es solo fútbol. Estoy preocupado por mis amigos, por mis jugadores", contó el técnico en referencia a la doble lesión de los porteros que obligó a Terry, el central, a ponerse los guantes. No es, sin embargo, el primer capitán de la selección inglesa que ejerce de portero. Bobby Moore, en 1972, ya se vistió de guardameta con el West Ham.
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