Alarma en la directiva del Barça por la reventa de carnets en la Champions

El Barça se enfrenta en cada partido europeo a un grave problema que no puede controlar y que entraña un alto riesgo: la reventa de abonos y entradas por parte de los propios socios. El club ha detectado que esta práctica ilegal ha aumentado y, pese a los mayores controles de seguridad, admite que es prácticamente imposible erradicarla. El miércoles se retiraron 60 carnets que estaban en manos de seguidores del Glasgow Rangers, a los que no se les permitió la entrada, de la misma manera que a algunos que llegaron ebrios. Pero muchos otros sí lo hicieron, ocupando localidades de socios azulgranas, lo que en algunos casos provocó tensiones y algún incidente.

El Barça ganó el partido, pero estas irregularidades le costarán un sanción económica por parte de la UEFA, que exige firmemente que las aficiones estén separadas en la grada. No será la primera multa que reciba. Ni mucho menos. Prácticamente en todos los partidos europeos ha sido sancionado por este motivo, con cantidades que oscilan entre los 9.000 y los 12.000 euros.PERJUICIO ECONÓMICO

El club también dejó de ingresar cerca de medio millón de euros al verse obligado a cerrar las taquillas antes de tiempo por razones de seguridad. Además, unas 7.800 entradas que los socios liberaron para ponerlas a la venta a través del seient lliure se quedaron sin ocupar ya que también se acabó bloqueando ese sistema de compra por idéntico motivo. El miércoles por la mañana se registró un aumento considerable de los asientos liberados, en relación a las cifras habituales, aunque se atribuye más al "temor" que la presencia de los hinchas británicos provocó entre algunos abonados.

El club recibió ayer numerosas quejas de socios lamentando la presencia de seguidores del Rangers en zonas del estadio que tenían acotadas. Uno de los mayores problemas se originó en el gol sur. Unos seguidores británicos tuvieron un enfrentamiento verbal con miembros de la peña Almogàvers cuando exhibieron banderas de la República de Irlanda. Los Mossos acabaron desalojando a varios de los escoceses.COMISIÓN DE DISCIPLINA

De momento, los 60 carnets retirados irán a parar a la comisión de disciplina, que investigará cómo han llegado a manos de seguidores del Rangers. Si se demuestra la reventa, los titulares de los carnets serán sancionados y se exponen incluso a perder su condición de socios. El Barça también estudiará las reclamaciones que espera recibir en los próximos días por parte de abonados al Camp Nou reclamando un nuevo carnet por "extravío o robo".

"La mayor reventa que hubo el miércoles en el Camp Nou fue a través de los propios socios, que cedieron sus carnets a los escoceses", explicó ayer a este diario el mayor revendedor de España por internet y que cifró en una media de "200 euros" el precio que pagaron los escoceses por carnet. El vicecónsul británico también denunció que un grupo importante de seguidores del Rangers adquirió "entradas falsas", que fueron requisadas por los responsables de seguridad del Camp Nou, principalmente en las puertas 18, 19 y 21 de acceso al estadio.INTENTO DE HACERSE SOCIOS

En el afán de conseguir una entrada, hubo quienes lo intentaron a través de un curioso sistema. Durante las últimas semanas, el Barça recibió numerosas peticiones de ciudadanos escoceses que querían hacerse socios. "A todos ellos les contestamos que no habría ningún problema en darlos de alta, pero a partir del jueves, es decir, después del partido", indicaron fuentes del club.

Mark Smithson, vicecónsul británico en Barcelona, expresó el malestar de la delegación diplomática por los "problemas incívicos" que provocaron los seguidores del Rangers en Barcelona. Según el Consulado General Británico, que cuantificó en unas 16.000 las personas que finalmente viajaron, algunos hinchas pasarán el fin de semana en Catalunya, aunque la mayoría regresó ayer a las Islas Británicas.